No estuvo muy afortunada la dirección de la Caja Insular de Ahorros de Canarias con la circular que envió a todas sus oficinas informando de “un producto muy ventajoso”, consistente en préstamos de hasta 6.000 euros destinados a los militantes de Nueva Canarias/Nueva Gran Canaria que quisieran colaborar a la financiación de la campaña electoral del partido. La idea es genial (la de NC) porque sirve para canalizar muchos deseos de ayuda y para hacer más transparente la financiación de los partidos políticos. Cada militante pone un kilito y tiene seis años para devolvérselo a La Caja, que le cobra por el método de amortización francés, recibito mensual con cuota fija. Pero decíamos que La Caja se equivocó porque, a pesar de que la idea era de NC, limitó su circular a ese partido, algo que le debieron hacer ver a los directivos que, rápidamente, retiraron el documento e hicieron extensivo el “ventajoso producto” a todos los partidos políticos. Pero la patente es de Nueva Canarias, que conste.