A juicio de Nueva Canarias, “las conversaciones de miembros del Gobierno (...) demuestran que Coalición Canaria es un partido que confunde política y negocios y trabaja por la hegemonía de una isla sobre las demás”, Tenerife, claro. En un comunicado difundido este viernes, NC dice que esa apuesta por la hegemonía de una isla se demuestra en “una conversación entre el ex director del Gabinete del presidente del Gobierno de Canarias, Salvador Iglesias, y el empresario Santiago Santana Cazorla”, en la que el primero “afirma que el poder está en Tenerife revelando el pensamiento de los dirigentes de ATI”. Bueno, no está mal como análisis, pero quizás un poco rebuscado dada la maraña de asuntos más gruesos que rodean esas patujadas de Iglesias, su peso real dentro de ATI y la innecesaria confirmación de que nada ha cambiado nunca.