Empiezan a respirar tranquilos algunos comercios de la ciudad de Telde gracias, miren por dónde, a la Operación Faycán, que no todo iban a ser desgracias. Ya les contamos en una ocasión el caso de un muy meticuloso alto cargo que acudía puntualmente cada mañana a un bazar multiventas a cambiar su billetito de 500 euros con los que pasar el día y blanquear un poco. Pero no era el único personaje -no imputado por el momento- que se dedicaba a tales menesteres. Sabemos de una compañera de trabajo y de vocación política que hacía lo mismo, pero en este caso en un supermercado, donde temblaban las cajeras cuando la veían entrar. Estas prácticas, por lo menos, ya han cesado en Telde, entendemos que por los balsámicos efectos de la investigación y no porque alguien haya pedido cobrar en billetes chicos.