Deben tener en Coalición Canaria unas encuestas verdaderamente demoledoras que colocan a esa formación política tan prometedora en las condición minoría extraparlamentaria. O al menos fuera del mundo oficial en la provincia de Las Palmas. Los cerebros, si es que queda alguno allí, se pusieron a trabajar para encontrar la manera de arañarle algún voto a Nueva Canarias por la vía de acusar a ese partido de traicionar a Canarias. Ya lo decíamos aquí ayer, que en el mensaje telefónico del pobre Bañolas sólo se pronunciaban dos nombres propios, el suyo de él y el de Román Rodríguez. El primero, para darse a conocer, que ya puede, ya, y el segundo, para acusarlo de haberles dejado in puris naturalibus al disolver el grupo parlamentario, una de las tetas. Y para que quedara claro, se dedicaron a violar la ley este viernes con unos carteles absolutamente infames que no hacen más que corroborar que si no existiera Coalición Canarias, las islas vivirían con muchos menos sobresaltos.