Hay cosas que pasan en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria que no alcanzan el grado de noticia de importancia porque el alcalde, Jerónimo Saavedra, y gran parte de su equipo de gobierno se encuentran en estado de gracia. Hasta esa salida de tono apoyando el Gran Canaria Ballet cae simpática en la ciudadanía, por más que el alcalde se haya lanzado al ruedo sin tener toda la información del Cabildo y las alternativas que se plantean para la danza en la isla. Hay más cosas en ese Ayuntamiento que van sin frenos, como algunos coches oficiales. El que hasta hace unos días tenía asignado la concejal Chani Ruiz se quedó sin ese vital mecanismo cuando circulaba por la Avenida Marítima, y la pericia del conductor evitó males mayores, que se redujeron a una colisión por alcance. El parque móvil municipal, que hace aguas desde hace años, puso a disposición de la concejal el viejo Mercedes que utilizó don Juan en su día, y la dejó tirada en una visita oficial al barrio de Marzagán. Ya que se ocupa de la vivienda, que le pongan algo más sólido a Chani Ruiz, para que aguante.