En cuanto al consumo de drogas, la mayoría del PPE votó en contra, salvo 25 diputados, 16 de ellos españoles, entre ellos Fernando Fernández. El texto de la moción dice textualmente: El Parlamento Europeo “pide a los Estados miembros y a la Unión que se aseguren de que las personas que abusan de sustancias estupefacientes tengan pleno acceso a los servicios de salud especializados y a tratamientos alternativos y que no sean tratados como delincuentes sólo por el consumo personal de drogas ilícitas”. Un eurodiputado de Los Verdes comentaba jocosamente que gracias al PP, Holanda no va a ser “expulsada de la UE” (allí está regulado y despenalizado el consumo de drogas blandas en tiendas especializadas), pero a lo que se ve, a la gigantesca hipocresía mundial (y fiscal) en esta materia no hay quien le ponga coto.