En el apartado de racionalización y reorganización de los inmuebles usados por la Comunidad Autónoma de Canarias hay algunas cosas que nos llaman la atención. Por ejemplo, se propone en este borrador de medidas de austeridad la aplicación de mecanismos para “el uso compartido de espacios de trabajo en los supuestos en que se disponga de despacho en lugar distinto a la sede oficial de la consejería correspondiente”, lo que a continuación lleva a proponer que “en ningún caso se asignen despachos cuando el espacio permanezca desocupado con carácter general más del 40% de la jornada laboral”. Eso significa, ni más ni menos, que existen despachos así, que se asignan, se amueblan, se les enciende la luz y el aire acondicionado y el interfecto o interfecta puede que ni lo pise. Igualmente se propone la creación de espacios más diáfanos en las oficinas públicas, suprimiendo mamparas y otros elementos que elevan los costes de establecimiento así como los de agua y aire acondicionado. De prosperar las medidas de este borrador para la austeridad, se suprimirán las jornadas de trabajo vespertinas y se abrirán los edificios públicos entre las 07.30 y las 16.00 horas, las 15.00 en horario de verano (del 1 de julio al 30 de septiembre).