En medio de ese debate interno y no tan interno del PSOE canario en el que no es baladí el modelo de oposición y de estrategia política que haya de adoptar tras su congreso, este domingo volvió a irrumpir como elefante en cacharrería el periódico tinerfeño El Día para lanzar un nuevo e inquietante mensaje. Además de sus impertinencias y extravagancias soberanistas y africanistas, que ya no despiertan estupor sino descojono generalizado, don Pepito volvió a la carga contra el portavoz parlamentario del PSC, Santiago Pérez, que ya acumula más de cien editoriales claramente ofensivos. El delito que Pérez ha cometido a ojos del editor de El Día no es, como pretende camuflar el diario, el de actuar como godo colonizador defensor de la opresora metrópoli, sino el de encarnar desde el PSOE una ruptura con los viejos hábitos de la resignacion ante el corrupto régimen que a día de hoy sigue controlándolo todo en Canarias. De ahí que en el editorial de este domingo, don Pepito haya vuelto a insistir en la cualidad del diputado socialista de ser “el redactor de las minutas denunciadoras”, en referencia a escándalos como el de Las Teresitas, que es donde duele.