Tiene mucho peligro eso de utilizar las cifras del desempleo como arma arrojadiza del debate político. Las competencias en esa materia están en parte situadas en el ámbito del Estado, que promueve políticas de empleo y contabiliza a los desempleados, a la población activa y las altas y bajas en la Seguridad Social. Pero casi todas las autonomías, incluida la canaria, tienen transferidas las competencias en los asuntos esenciales, como la formación, las prestaciones y las políticas activas de empleo. Por eso parece bastante peregrino que el portavoz del PP en el Cabildo de Gran Canaria, Larry Álvarez, culpe a esa Corporación del incremento del desempleo en la isla. Que sepamos, las corporaciones locales pueden echar una manita con planes locales de empleo, con acciones muy concretas que se vienen realizando históricamente en campañas de choque y otras iniciativas. Pero de ahí a cargarle el mochuelo va un trecho que habrá que medir con cuidado porque se le puede volver encima al que emplea el empleo para jugar a político. Que hable Jorge Rodríguez, a ver.