Hasta la prensa de Madrid se interesó este lunes por las suculentas declaraciones que el marqués de La Oliva, Domingo González Arroyo, hizo a Ser Las Palmas. El hombre está que se lo lleva el demonio desde que Soria, su ex presidente, su ex líder natural, dijera de él que está totalmente irradiado de la organización. Así que, en cumplimiento de sus amenazas, ha ido subiendo el tono de sus críticas al vicepresidente del Gobierno, sobrepasando incluso algunos registros hasta ahora imbatidos. Nos imaginamos que los abogados de su Excelencia ya habrán tomado nota de ese reto lanzado por González Arroyo (que me denuncie, que tengo ganas de verlo en los juzgados) y las lindezas que ha dicho acerca del enriquecimiento que el presidente del PP ha experimentado desde que entró en política. Pero seguimos a la espera de conocer qué gran asunto tiene en sus manos González Arroyo que podría acabar con la carrera política de Soria. A ver si va a prescribir y se lo va a tener que tragar.