El presidente del Gobierno de Canarias, su consejero de Turismo y su viceconsejera del mismo ramo no viajaron solos nunca. Además de su jefe de Gabinete, Salvador Iglesias, al que dejaron atrás en Punta Cana (viajó a México en vuelo regular) en los vuelos privados utilizados en este periplo figuraban también como pasajeros el presidente de Bancaja, José Luis Oliva, además de los empresarios Fluxá, Reyero, Cobiella, Rainieri, Roseyó, Caballero, Vasallo, Miralles y Codolá. En definitiva, mucho nos tememos que el carácter oficial del viaje del presidente de Canarias brilló por su ausencia. Al igual que ocurrió con el viaje a Japón, quizá hubiera sido más fácil contarlo todo desde el principio y evitar que ahora tenga que venir la oposición a preguntar al presidente a qué vienen estos vuelos privados para un viaje que se suponía oficial.