Desmentidos con la boca chica

Hay desmentidos que es mejor ahorrarse. Bueno, desmentidos y matizaciones que solo terminan conduciendo a complicarle las cosas a los protagonistas de la historia que se trata de enmendar. Dos de los cuatro alcaldes que aseguramos –y seguimos asegurando- fueron cariñosamente tocados por Luis Soria, el hermanísimo, para amañar el concurso de gestión externalizada de alumbrados públicos han salido a la palestra a matizar, desmentir o enredar cual es su visión de la historia que aquí les hemos contado esta semana. El de Tías, Pancho Hernández, ha confirmado hilo por pabilo nuestra información: ha admitido en varios medios de comunicación conejeros que Luis Soria le llamó para que recibiera al representante de VVO-Effico, Enrique Sánchez; ha admitido que para que atendiera la llamada del hermano del señor ministro, intervino previamente la presidenta insular del PP de Lanzarote; Astrid Pérez, y ha admitido que la reunión se centró en al deseo del empresario de participar en el pliego y en el concurso del alumbrado. Su matización nada tiene que ver con el fondo de la cuestión porque Hernández asegura que esa visita no influyó lo más mínimo en su decisión de celebrar el concurso tal y como lo tenía previsto, es decir, sin hacer trampas, exactamente lo que también sostuvimos en nuestra información. Por lo tanto, agradecemos al alcalde de Tías que la ratifique y que reconozca los hechos. Es encomiable y humanamente comprensible que, para hacerlo, nos haya acusado de tener tirria a José Manuel Soria, y por simpatía, a su hermano Luis. No está en condiciones de volver a enfrentarse a las más altas instancias de su partido tras haberse mostrado públicamente muy crítico con la gestión petrolera de su excelencia. Es, por lo tanto, comprensible su intento de desmarque. Pero, insistimos, le damos las gracias por su sinceridad.

Manolo Domínguez dice que no conoce a Luis Soria

El otro alcalde que ha tratado de enmendarnos la plana es el de Los Realejos, Manuel Domínguez, presidente del PP de Tenerife, que fue algo más contundente en su mentís hecho en Mírame TV a preguntas del periodista David Cuesta. Dijo Domínguez, para reforzar su desmarque que ni siquiera conoce a Luis Soria, lo que segundos después él mismo puso en remojo al recordar que a lo mejor lo ha saludado en alguna que otra ocasión. También dijo desconocer a Enrique Sánchez, de VVO y Effico, y negó en absoluto que alguna de esas empresas participara en el concurso del alumbrado de su municipio que, por cierto, adelantó que se lo ha adjudicado a Endesa. Con un poco de perspectiva comprobaremos la veracidad de las afirmaciones rotundas del señor alcalde porque, por lo que tenemos entendido, Effico sí se presentó a ese concurso. Nunca hemos sostenido en nuestras informaciones que las presiones de Luis Soria dieran resultado positivo, al menos en los Ayuntamientos que hemos mencionado: Los Realejos, Tías, Moya y Valleseco. Más bien al contrario, sus alcaldes se mantuvieron firmes en sus iniciales propósitos, lo que desploma por completo cualquier suerte de enredo que alguno de los mencionados haya querido lanzar para desbaratar nuestras pesquisas. Nos falta por verificar qué ha pasado en el Cabildo de Gran Canaria, donde Luis Soria y Enrique Sánchez se reunieron con el consejero Carlos Sánchez, del mismo modo que nos falta por conocer qué resultado dieron esas mismas gestiones en otros municipios canarios gobernados por el PP donde también las ha habido con los mismos personajes en presencia. Tiempo al tiempo, que veremos dentro de poco quién ha mentido, quién ha hecho requiebros a hechos ciertos y quién directamente ha mentido.

Bermúdez ficha a un dirigente del PP

Se le ha abierto otro frente dentro de su partido al alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez. A la bronca que le planteó el sector más abrupto de Coalición Canaria por la gestión de su primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo, el socialista José Ángel Martín, se suma ahora su decisión de fichar como jefe del gabinete de la alcaldía a un ex dirigente del Partido Popular de Tenerife, Alfonso Cabello, hasta ahora director comercial de Radio Club Tenerife (Cadena Ser). Bermúdez lo intentó con varios profesionales cercanos a CC, como su amigo Jaime Pérez Llombet, actual director general de Relaciones con los Medios del Gobierno de Canarias; Santiago Negrín, jefe de Informativos de Radio Club, quien fuera mano derecha para los medios informativos con Adán Martín; Cristina García Maffiote, ex jefa de prensa de Miguel Zerolo, y Pedro Mengíbar, experto en Carnaval. Todos le agradecieron la deferencia pero por distintos motivos declinaron el ofrecimiento. Así que Bermúdez tiró de Alfonso Cabello, con un amplio historial en el mundo de las relaciones comerciales, de la estrategia política e incluso de la gestión pública. No en vano ha sido gerente del Organismo Autónomo de Fiestas de esa ciudad, cargo para el que le designó la popular Maribel Oñate; o director de eventos del centro Magma, de Adeje, por decisión de la ex popular Rita Martín. Fue, además, asesor de Ángel Llanos, en sus días floridos en el PP, en el Cabildo, y desde 2011, responsable de actos públicos de ese partido por decisión de su ex presidenta insular Cristina Tavío. Era, hasta el otro día, vocal del comité ejecutivo insular del PP, y decimos que hasta el otro día porque en su entorno aseguran que ya ha gestionado su baja del partido, con antelación suficiente para poder entrar a las órdenes de un alto cargo nacionalista sin que le cosa pareciera más llamativa de lo que ya es.

Un puesto de salida en 2015

El último destino profesional de Alfonso Cabello ha sido el de director comercial de Radio Club Tenerife, donde ha desempeñado una labor que los que la conocen valoran mucho. Por eso a muchos ha extrañado que decidiera aceptar la oferta de trabajo que le ofrecía el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, un puesto sin duda de relumbrón pero con la única garantía de un horizonte en mayo de 2015. ¿La única garantía? Parece que no. En los mentideros políticos y periodísticos tinerfeños se da por hecho que Bermúdez se ha comprometido con Cabello a meterlo en un puesto de salida en la lista municipal de Coalición Canaria al Ayuntamiento en las próximas elecciones, algo que ni está en las manos del regidor ni está permitido por los estatutos nacionalistas, que exigen al menos un año de militancia. Y desde ahora hasta mayo de 2015, por mucha prisa que se dé el aspirante para afiliarse, no llegará a tiempo. La situación se ha complicado al haberse despedido ya de su empleo Cabello sin que el alcalde haya firmado aún su decreto de nombramiento, lo que le cuesta hacer ante la contestación en su partido por el fichaje de un adversario político para un puesto tan sensible.

Javier Artiles, de nuevo al borde del precipicio

Sonaba demasiado bonito para el tapado del caso Lifeblood obtener cuatro años después de aquella trapisonda el concurso de la hemodiálisis que la legalidad le negó en 2010 al descubrirse que todo estaba amañado. Javier Artiles, que se erigió en ganador de esta última licitación al ofrecer un precio que se situaba el borde mismo de la baja temeraria, ha vuelto al borde del precipicio al recurrir la adjudicación una de las empresas concursantes, la multinacional Baxter, otrora socia del abogado propietario de Avericum. La falta de transparencia de su oferta, en la que se ocultan datos relevantes bajo el manto de la confidencialidad empresarial, está animando a otros licitadores a la rebelión. No puede ser que Artiles prometa unos precios por cada sesión de diálisis que ni son los que su propia empresa está cobrando ahora mismo en el área sur de la sanidad grancanaria, ni se parecen en nada a los que ofertó en 2010 cuando el PP le regaló aquel empuercado concurso. Todavía le quedan a Artiles amigos dentro del Servicio Canario de Salud, porque de otra manera no se entiende que algunos funcionarios opten por el secretismo antes que por la transparencia y se plieguen a sus exigencias de confidencialidad en aspectos tan vitales como la calidad de las membranas que piensa utilizar para los pacientes que han de dializarse tres veces por semana o en el número de médicos especialistas en nefrología que dice que va a reclutar para cumplir con sus propias promesas. Suena muy sospechoso que en la cena de navidad de su propia empresa brindara con sus empleados por el concurso dándolo por ganado, o que haya fichado al que fuera su benefactor en el Servicio Canario de Salud, Guillermo Martinón, incluso antes de tener firmada la adjudicación definitiva, que ahora se paraliza como consecuencia de los recursos. ¿Qué pasará cuando se levante el velo y se descubra la verdadera oferta de este trilero especialista en esconder sus fichas para obtener concursos? Lo sabremos pronto. Y, de inmediato, nuestros lectores.