Familia que se atrinchera unida, permanece unida. La máxima no es nuestra, ni sabemos que la haya acuñado nadie con anterioridad. Pero es de tentadora aplicación a la palabra, la obra y la omisión del secretario general del PP canario, Manuel Fernández, de profesión sus asesoramientos y sus compatibilidades con el Grupo Anfi. Esta semana irá al pleno del Parlamento de Canarias una propuesta del PP por la que se designará miembro del Consejo Social de la Universidad de La Laguna a Manuel Fernández Vega, que viene a ser hijo del secretario general y parlamentario autonómico de igual nombre e igual primer apellido. La palabra es trinchera (“dispararemos desde la trinchera al cargo público que no haga lo que se le ordena”). La obra es enchufar al hijo, y la omisión es saltarse los sagrados principios del antinepotismo y de elegir para los consejos sociales a personas de reconocida trayectoria universitaria, docente o profesional. Y Manolito ni se acerca.