Hay dos famosos arquitectos grancanarios que presenciaron una vez una escalofriante conversación en el despacho del director general de Costas, José Fernández, en Madrid. Éste hablaba por teléfono con José Manuel Soria, por entonces presidente del Cabildo, que amenazaba al director general con retirar la aportación económica de la Corporación insular si un muy determinado ingeniero de Caminos era el autor de un proyecto de rehabilitación del litoral de Mogán. El presidente del Cabildo ahora es otro y no sólo no se dedica a hacer el babieca con sectarismos y vetos fascistas, sino que además se trae perritas frescas de Madrid. Este viernes presentó proyectos palpables por importe de 61 millones de euros en costas. Gran Canaria se instala por su cuenta en Madrid ante lo que se le ha venido encima.