Se anima cosa buena el pulso que las academias han decidido proponer (muy caballerosamente, eso sí) a la consejera de Empleo y Asuntos Sociales del Gobierno de Canarias, Águeda Montelongo (PP). Hasta la Confederación de Empresarios se ha unido a las críticas mostrando “serias dudas sobre la correcta aplicación de los criterios” en el reparto de los cursos para desempleados. Añadamos a eso las denuncias, amenazas y asambleas del sector (este jueves, salón de actos de Femepa en León y Castillo, 81), y la aparición de nuevos y reveladores datos, como esas diferencias entre los 627.000 millones concedidos a la FEHT (federación, importante el matiz) y los 1,9 millones de Ashotel (asociación); la publicación en prensa por parte de Asinca de los cursos que va a impartir cuando todavía no se han publicado siquiera en el BOC, o los cursos de camareras de piso concedidas a la Asociación por el Fomento de la ¿Igualdad? Y la consejera, escurriendo el bulto.