No está precisamente el PP en las principales corporaciones grancanarias para muchos trotes. A las tonterías de Larry Álvarez y los patinazos de la alcaldesa consorte de Agaete, María del Carmen del Rosario, hay que sumar las paradojas que protagoniza cada día el grupo municipal que encabeza Pepa Luzardo en Las Palmas de Gran Canaria. El nuevo gerente de Guaguas Municipales, Sebastián Sansó, un hombre que fue de la máxima confianza del partido en Infecar y en Proexca, ya ha probado cómo las gastan los suyos cuando de hacer oposición absurda se trata. Porque no parece que tenga mucha explicación que el PP municipal se haya opuesto a la nueva formulación que propone el PSOE para Guaguas Municipales tras reconocer que es imposible enderezar una empresa con unos 33 millones de deudas y una continua pérdida de viajeros, a razón de un millón al año. Todo ello, por mucho que Pepa se ponga a hacer el pino-puente, la situación es producto de doce años de auténtico desprecio al transporte público por parte del PP.