No hay que estrujarse mucho la cabeza para comprender la situación: se avecina cambio político en Canarias y la dirección general de la Tele Canaria es removible siempre. Santiago González es buen amigo de Luis Fernández, presidente de la Corporación de RTVE y, éste tras recibir calabazas de otros profesionales como Angels Barceló, se acordó de Santiago, el compañero que le ayudó lo suyo a penetrar en Canarias cuando Fernández se hizo cargo de la productora Plural Televisión. González y Fernández se conocen desde que el primero fuera jefe del segundo en los servicios informativos de la Ser en Madrid, a donde llegó el canario todavía más despeinado que de costumbre a hacer sus primeras prácticas de periodista. Lo demás es fácilmente entendible. Bueno, todo menos lo del PSOE, que está en Belén con los pastores.