Amenaza tormenta en Marpequeña, municipio de Telde, y aunque les pueda parecer increíble, nada tiene que ver la Operación Faycán. El ojo del fenómeno meteorológico adverso está localizado en una urbanización de reciente construcción, Residencial Las Playas, cuya tercera fase se entregó este mismo verano. Los propietarios están asombrados por lo que les ocurrió con las recientes lluvias, y no porque se inundaran sus exclusivas viviendas por la riada, es decir, de abajo hacia arriba, sino porque los tejados se convirtieron en auténticas cataratas. Fue gracias a la lluvia como se enteraron de que bajo las hermosas tejas de “alta calidad” no había más que unas planchas tipo Uralita, con lo que ya se están temiendo lo peor cuando llegue el solajero. La promotora, Iniscan, alega que las chorreras (porque goteras precisamente no eran) derivan de los tragaluces que algunos propietarios abrieron en los techos, lo que los vecinos rechazan de plano. Para empezar a hablar y ante el desinterés de los promotores, los afectados han pedido la intervención del Colegio de Arquitectos, que habrá de nombrar un perito independiente que se pronuncie y obligue a la constructora a mojarse un poco. Algo menos que ellos, que acabaron enchumbados por completo.