El homenajeado se comportó como un caballero. Pudo haber caído en la tentación fácil y continuar subido en las palabras agrias de Zerolo para adentrarse en un discurso de confrontación, no se sabe muy bien con quién. Porque el “que se jodan” de Zerolo no sabemos muy bien a quién iba dirigido: si a los jueces, si a la Policía, si a los medios de comunicación de Las Palmas o si a los adversarios políticos, particularmente al PSOE y a su lider regional. No. Suárez Trenor prefirió hacer un discurso propio de un homenaje, recordar los inicios en la calle Méndez Núñez, alrededor de una mesa con botella de güisqui y máquina de escribir prestada. Nada de jueces ni policías, nada de malos recuerdos. Gracias a todos y fidelidad al partido. Que ya es.