No se detienen los voluntarios, los trabajadores y el presidente de la Fundación Yrichen, Jorge Hernández, ante la indiscutible crisis que todo lo pone en juego, hasta la función de esta entidad, dedicada a atender a las personas con problemas con las drogodependencias y a sus familias, colectivos que precisamente se incrementan en estos tiempos tan convulsos. La gente de Yrichen no se encoge ante las adversidades, y si las subvenciones flaquean, ellos buscan otros medios de financiación, como la conmovedora campaña de apadrinamiento que han promovido, o acciones como la de estos últimos días en el Real Club de Golf de Las Palmas, en Bandama. 72 parejas de jugadores, un total de 144 personas, participaron en el I Torneo Benéfico de Golf Yrichen. La recaudación ascendió a 3.000 euros, con veinticinco empresas colaborando mediante la aportación de premios y regalos. Cuatro socios del club fueron decisivos: Pedro, Lisandro, José Luis y Carlos, a los que mencionamos para los honores de ordenanza. Y los voluntarios y trabajadores de Yrichen, que tampoco escatiman en esfuerzos.