La ciudad que se convirtió en Archipiélago
La candidatura de Las Palmas de Gran Canaria a Capital Europea de la Cultura 2016 ha crecido. La ciudad-isla, como reza el proyecto, se ha convertido en un Archipiélago. Y es que el programa pretende extenderse a toda Canarias, con actividades que se celebrarán en 2016 en cada una de las seis islas, además de Gran Canaria.
“¿Por qué no lo proyectamos sobre el conjunto de las islas?”, fue una de las propuestas que surgió tras pasar el corte, aeguró este miércoles el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Jerónimo Saavedra. Es una de las novedades que incluye el proyecto final, que este miércoles fue enviado al Ministerio de Cultura como último paso hacia la meta. Y también uno de sus mayores atractivos, según el director artístico, Juan Cambreleng, que resaltó que si LPGC resulta ganadora será “la primera isla, el primer archipiélago” en convertirse en Capital Cultural Europea. Para ello, la Oficina de LPGC 2016 y el Ayuntamiento han tenido que camelarse al resto de Cabildos insulares, que serán los organizadores de la mayoría de eventos proyectados en Lanzarote, Fuerteventura, Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro.
Pero no ha sido el único escollo. La oficina que gestiona la candidatura ha propuesto un nuevo organigrama que incluye a coordinadores para cada una de las siete islas y cuyo trabajo será supervisar la labor de un equipo técnico y artístico de 21 personas. Además, la participación como patrocinadores del proyecto de varias empresas de transporte interinsular, tanto aéreo como maritímo, permitirá que los visitantes y ciudadanos canarios se desplacen de una isla a otra “con diversas promociones y ventajas”, según el documento, para disfrutar de la oferta completa con paquetes de actividades, rutas o itinerarios culturales.
Pese a la ambición que supone esta fusión, la oferta concretada se queda, de momento algo escasa. Cada isla incluirá unicamente una actividad “bajo el paraguas de la candidatura”. La mayoría serán exposiciones y ciclos de conferencias como las que se celebrarán en Tenerife sobre Eduardo Westerdahl, en Fuerteventura con el grupo LADAC como protagonista, o en La Gomera, donde se analizará la relación entre cultura y naturaleza.
Destacan otras tres propuestas, las de Lanzarote, El Hierro y La Palma que se convertirán en las sedes de tres festivales programados para 2016. Si LPGC consigue el título de capital europea de la cultura compartirá, durante dos semanas, la celebración del multidisciplinar MAGMA. Además, el proyecto del artista palmero Daniel Negrín, Isla de Estrellas (un gran montaje audiovisual con los rincones más espectaculares de la Isla Bonita como escenario), viajará hata la capital grancanaria. Por último, el Cabildo de El Hierro pondrá en marcha, al amparo de la candidatura, el festival Isla del Fin del Mundo, una propuesta que se extenderá a artistas europeos de todas las disciplinas y con el que se pretende recrear y reinventar el mito del jardín de las Hespérides.