“Mi sueño es que Plácido Domingo venga a enseñar al Teatro Real cuando deje de cantar”
MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
Gérard Mortier, que ocupará su puesto de director artístico del Teatro Real de Madrid a partir del próximo mes de septiembre, aseguró hoy que su “sueño” es “conseguir que Plácido Domingo venga a enseñar al Teatro Real cuando decida dejar de cantar”.
Así lo confesó en una entrevista con Europa Press en la que elogió al consagrado tenor madrileño. Mortier cree que el artista se planteará dentro de pocos años su retirada y afirmó que “Plácido Domingo es mucho más que un cantante”. Precisamente, el coliseo madrileño ha programado la próxima temporada un concierto de aniversario en su honor en el que está previsto que vengan artistas de todo el mundo a rendirle homenaje.
Si algo tiene claro Gérard Mortier es que su intención al frente del Real pasa por objetivos concretos, como situar al coliseo madrileño entre los primeros teatros de ópera de Europa (“podemos ser mejores que París”, aseguró); hacer que Madrid sirva de “puente” con América Latina (al Teatro Colón de Buenos Aires viajará la producción del Real de 'Aida' y a Brasil el 'Don Quijote' de Halffter); y apoyar con decisión a los nuevos creadores.
En este sentido, Mortier adelantó que ya ha hablado con Mauricio Sotelo para poner música a una conocida obra de Federico García Lorca y también con la compositora sevillana Elena Mendoza, actualmente afincada en Berlín, para un trabajo en torno a textos de Onetti. “Mi intención es que cada temporada haya alrededor de tres estrenos absolutos de nuevas creaciones”, señaló.
Al hilo de esto, el próximo director artístico del coliseo madrileño, señaló que se ha puesto en contacto con Cristóbal Halffter pera llevar a escena su nueva ópera 'Lázaro'. “Es una partitura que me gusta mucho aunque es una obra difícil y muy filosófica. Confío en que salga adelante para la temporada 2013-2014”, avanzó. Entre esa larga lista de contactos también ha tenido una larga conversación con el realizador Pedro Almodóvar para quien, según Mortier, “es importante buscar una ópera que tenga mujeres con carácter”.
TEATRO NO PROVOCADOR
Otro de los objetivos que se propone Mortier es “convencer al público de que un teatro moderno no es necesariamente provocador o chocante”, dos términos que parecen perseguir al director belga.
A este respecto, lamentó la imagen que algunos periodistas han dado de él. “A veces me hacen sentir como si fuera un terrorista pero sí que es verdad que me encanta excitar al público, ver la emoción de la gente, y me parece bueno también que algo no guste porque eso hace pensar. Cuando todo está bien resulta aburrido”, afirmó.
Mortier consideró que el público del Teatro Real “no es más conservador que el de otros teatros de ópera” y lo ha demostrado el éxito de producciones como 'Katia Kabanova' o 'Jenufa', ambas de Leos Janácek. “Creo que lo importante es el contacto con los espectadores. Al público sólo le pido que sea curioso y que no se cierre a lo nuevo”, afirmó añadiendo que siempre ha sido “muy gentil” con él.
TEMPORADA DE “TRANSICIÓN”
Mortier, que calificó está primera temporada que presenta de “transición”, ha tenido que lidiar con un presupuesto disminuido considerablemente debido a la bajada en las subvenciones de las Administraciones. Y esta reducción se mantendrá aún por otros tres años más.
Para combatir este problema, el belga tiene sus recursos como acudir a las coproducciones, fomentar el patrocinio y, sobre todo, tener “imaginación”.
Por otra parte, la Orquesta y el Coro son dos elementos centrales para Gérard Mortier. Está previsto que el próximo mes de abril se realicen audiciones para seleccionar a los integrantes del Coro con el ánimo de que esta formación, de la que será responsable el argentino Andrés Máspero, esté lista para el comienzo de la temporada.
Asimismo, el nuevo sistema que Mortier propondrá para la dirección musical de la Orquesta Sinfónica de Madrid (la alternancia en el podio de una serie de directores entre los que se encuentran Pablo Heras-Casado, Víctor Pablo Pérez, Sylvain Cambreling o Alejo Pérez) es una fórmula que, en su opinión, ha funcionado con éxito en otros teatros como la Ópera de París.
UN TALLER LÍRICO
Otra de las iniciativas que a Mortier le gustaría poner en marcha es la creación de un “taller lírico”, que ayude a los cantantes “a crear un estilo”, dijo reconociendo que éste es “el gran problema de hoy”. Para que le ofrezcan ideas se ha puesto en contacto con la veterana mezzosoprano Teresa Berganza y con el propio Plácido Domingo.
Respecto a la reticencia que han mostrado algunos grandes nombres de la lírica (como Marcelo Álvarez) a actuar en el Teatro Real al saber que Mortier dirigirá el coliseo, el belga quitó hierro al asunto y mostró su preferencia por otros grandes cantantes, como el barítono español Carlos Álvarez o el tenor argentino Luis Lima. “Me encantan”, confesó.
Finalmente, el director belga apuntó una de las grandes novedades de la temporada en consonancia con su firme propósito de lograr nuevos públicos: la creación de un bono joven para menores de 30 años que incluirá tres títulos en el patio de butacas por 90 euros.