El 'lobby bancario' insta a España a pedir el rescate
PEKÍN, 18 (Reuters/EP)
El director gerente del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF por sus siglas en inglés), Charles Dallara, ha recalcado que España o Italia deben solicitar el apoyo de un programa de ayuda de la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para evitar que fracase el nuevo programa de compra de deuda puesto en marcha por el Banco Central Europeo (BCE).
En una rueda de prensa en Pekín, Dallara celebró el compromiso adquirido por el BCE al poner en marcha el nuevo programa de compra de bonos por importe ilimitado para rebajar los costes de endeudamiento de los países con problemas en la eurozona, aunque advirtió de que existe el riesgo de que esta medida fracase.
“El anuncio del BCE fue muy valiente por un lado, pero no servirá de nada a menos que España o Italia soliciten el apoyo de una programa económico de la UE y el FMI”, advirtió Dallara.
En este sentido, explicó que en ausencia de una negociación gubernamental de un programa de reforma que esté respaldado por la Comisión Europea, el “masivo apoyo potencial” por parte del BCE se quedará solo en potencial y no se materializará.
Los costes de endeudamiento de España han caído con fuerza desde que el BCE anunciara que estaba dispuesto a comprar bonos españoles, pero las grandes necesidades de financiación antes de acabe al año y una profunda recesión hacen que muchos analistas y políticos crean que solo es cuestión de tiempo que España necesite ayuda.
Asimismo, Dallara incidió en que las fricciones entre países son dañinas para el futuro de la unión monetaria europea y subrayó que Europa tiene posibilidades de superar esta crisis, “pero solo si existe un mayor consenso entre los 17 países que quieren un futuro unificado”
MÁS TIEMPO Y MEJORES CONDICIONES PARA GRECIA.
Por otro lado, Dallara, que representó a los acreedores privados en la negociación de la quita de la deuda griega, defendió que Grecia debería conseguir intereses más baratos a cambio de la ayuda de 130.000 millones de euros acordada, así como dos años más de plazo para devolverla.
Sin embargo, incidió en que estas condiciones solo se podrán dar si Atenas cumple con los compromisos realizados en materia de reforma fiscal. “Una vez que esto se haya hecho, y confío en que se hará, Europea y el FMI deberían moverse con rapidez para ampliar el periodo de ajuste al menos dos años y aportar un modesto apoyo financiero adicional para que esta ampliación sea eficaz”, explicó.
En su opinión, solo serían necesarios otros 15.000 o 20.000 millones de euros y cree que esto podría ser llevado a cabo en parte reduciendo los tipos de interés de los préstamos realizados por Europa y el FMI a Grecia “con condiciones más favorables”.
Asimismo, señaló que las respuestas ofrecidas a la crisis de la deuda griega han puesto demasiado énfasis en la austeridad en el corto plazo y no suficiente en que mejore la competitividad a la largo plazo del país.