Cuando el éxito es ''pasar desapercibido''
Álvaro Cáceres compara su labor con la de un árbitro de fútbol: ''Nuestro éxito es pasar desapercibido“. Cáceres, que es capitán de la Marina Mercante y miembro de la Corporación de Prácticos de Las Palmas, ha sido uno de los participantes en la mesa redonda sobre seguridad que ha tenido lugar este viernes en el programa El Correíllo, con motivo del especial Puerto de La Luz.
La labor de los prácticos consiste en “asesorar a los capitanes de buque para que realicen las maniobras en el Puerto con la mayor seguridad”. Para ello, expresó Cáceres, es necesario controlar los fondos, para que no varen o encallen, y los vientos.
Cada cinco años, el Centro Jovellanos del Ministerio de Fomento, ubicado en Asturias, organiza cursos de reciclaje para prácticos. “No hay que olvidar lo que ha pasado en el Golfo de México, con BP”, ha recordado Cáceres, que asegura que los trabajos con las plataformas petrolíferas que arriban al Puerto son “muy seguras”.
Otra de las patas importantes en materia de seguridad para el puerto es la de los remolcadores. Juan Ruiz, representante del Grupo Boluda, explica que su objetivo es “poner todos los medios al alcance de la embarcación para que no haya ningún problema en el momento del atraque”.
Para ello, el puerto de La Luz y de Las Palmas cuenta con cuatro remolcadores, con tecnología avanzada. De ellos, según explicó Ruiz, tres permiten realizar una maniobra de 360 grados en tan sólo 26 segundos y uno de ellos, el más moderno, la puede realizar en 16 segundos, lo que confiere “mayor seguridad” a las operaciones.
Las actuaciones en la materia concluyen con el amarre del barco. Jose Juan Socas, representante de Servicios Portuarios Canarios, explica que la actividad del amarrador requiere estar preparado “las 24 horas del día y los 365 días del año”. Su empresa ha obtenido el Premio de Excelencia del Gobierno de Canarias. “Hemos tenido que diversificarnos, en la lucha contra la contaminación marina, en el suministro de agua potable a buques...”
Cáceres, Ruiz y Socas coinciden en afirmar que, a pesar de los avances que ofrece la tecnología, en materia de seguridad “el factor humano sigue siendo insustituible”.
Seguridad sanitaria
A esta mesa redonda también acudió Jorge Petit, de la Clínica del Perpetuo Socorro, que mantiene fuertes vínculos con el puerto de La Luz y de Las Palmas prestando servicios sanitarios en las cercanías de las instalaciones portuarias.
“Nos interesa muchísimo el servicio con Puertos, su movimiento y actividad es bárbara”, reconoció Petit, que explicó que la clínica dobla el número de camas con respecto a la media nacional, emplea a 700 trabajadores y recibe un volumen de 100.000 pacientes por año.