El FMI y el BCE advierten de los riesgos de una 'guerra de divisas'
WASHINGTON, 7 (EUROPA PRESS)
El director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, ha asegurado que una 'guerra de divisas' no es “buena” para la economía mundial y ha alertado de que la cooperación a nivel global en materia de políticas económicas está disminuyendo.
En una comparecencia antes de que comience el encuentro anual entre el FMI y el Banco Mundial, Strauss-Kahn remarcó que el término 'guerra cambiaria' que se está utilizando para referirse a la diferencias que existen entre los diferentes países respecto al valor de las divisas es “demasiado militar”, aunque apuntó que “muchos consideran su moneda como un arma”.
El máximo responsable del FMI se mostró partidario de que, si finalmente se producen problemas entre diferentes países por los tipos de cambios, sean discutidos en el seno de la institución que él dirige.
A pesar de ello, consideró que no existen motivos para “usar los controles de capital” con el fin de evitar la volatilidad en los mercados de divisas y recordó que el objetivo de “reequilibrar” la economía global no se puede lograr sin que haya cambios en el valor de las divisas.
En esta línea, insistió en la necesidad de que el acuerdo global sobre la necesidad de coordinar las políticas económicas se mantenga, algo que no ocurre en estos momentos ya que, aunque no ha desaparecido, sí está “disminuyendo”.
El director gerente del FMI subrayó que este hecho supone “una amenaza real” sobre la recuperación económica mundial, ya que, según recordó, no es posible aplicar “soluciones nacionales a problemas globales”.
CONSOLIDACIÓN EN EL MEDIO PLAZO
Por otra parte, Strauss-Kahn se mostró a favor de poner en marcha planes de consolidación fiscal en el medio plazo, pero aseguró que no todos los países deben llevarlos a cabo de forma inmediata.
En esta línea, insistió en que la recuperación económica es “frágil y desigual” ya que, según recordó, la crisis ha finalizado para los países de Asia o América del Sur, que han registrado un alto crecimiento, mientras que la recuperación es “menos cierta” en Europa y Estados Unidos.
Asimismo, el director gerente del FMI recalcó que no se puede decir que la crisis ha concluido hasta que los actuales niveles de desempleo se reduzcan “de forma significativa”.
Respecto al sector financiero, el director gerente del FMI remarcó que las reformas regulatorias están todavía “rezagadas” en términos de supervisión y recalcó que la nueva normativa aprobada por el Comité de Basilea “no resuelve todos los problemas”.
Finalmente, consideró que es una buena idea establecer tasas al sector financiero, que permitirían tener recursos para hacer frente a futuras crisis, pero insistió en que no sería útil que esta se centrara en las transacciones financieras.
TRICHET AVISA DE LOS EFECTOS DE LA VOLATILIDAD
Por su parte, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, ha advertido sobre las “implicaciones negativas” para la estabilidad económica y financiera mundial de una 'guerra de divisas'.
“Creo que el tipo de cambio debería reflejar los fundamentales económicos”, dijo el banquero francés. “La excesiva volatilidad y los movimientos desordenados conllevan implicaciones negativas para la estabilidad económica y financiera”, añadió.
En este sentido, el presidente del BCE expresó su confianza en la postura expresada en numerosas ocasiones por las autoridades estadounidenses respecto a que “un dólar fuerte va en interés de EEUU”.
No obstante, el máximo responsable de la política monetaria de la zona euro declinó hacer comentarios sobre la posibilidad de que el BCE y la Reserva Federal hayan valorado ejecutar acciones conjuntas coordinadas sobre esta cuestión.
Por otro lado, Trichet reconoció que “a largo plazo” habrá divisas actualmente no totalmente convertibles que lo serán, lo que supondrá un cambio estructural en la constelación de divisas.