La necesidad de una reinvención integral del turismo en Canarias
El turismo en Canarias vivió en 2008 un cambio de inflexión en clave negativa al ser el primer año en el que no sólo no aportó al PIB insular, sino que restó, lo que va más allá de la crisis y exige medidas a corto y medio plazo para una reinvención integral del sector.
Así se desprende del estudio del impacto económico del turismo sobre la economía y el empleo de Canarias, el llamado estudio Impactur, que por quinto año consecutivo han elaborado la Consejería de Turismo del Ejecutivo regional y Exceltur.
José Luis Zoreda, vicepresidente de Exceltur, un grupo que asocia a 26 empresas del sector con el objetivo de mejorar la información y la toma de decisiones en este ámbito económico, dijo en la rueda de prensa de presentación del informe que es necesario unir esfuerzos “al máximo” y elaborar un pacto regional para el turismo.
En este pacto deberían coordinarse el sector privado y el público por encima de “batallas políticas” porque en ese replanteamiento “nos la jugamos”, afirmó Zoreda.
Del estudio Impactur correspondiente a 2008 se deduce que el turismo representa el 27% del total de la economía canaria, lo que equivale a 11.820 millones de euros.
El sector genera casi el 33% del empleo en las Islas, con 316.834 puestos de trabajo directos e indirectos, así como el 27% del total de los impuestos recaudados en el Archipiélago, con 1.799 millones de euros.
El turismo supone el 97% del total de las exportaciones de servicios de Canarias, con 7.832 millones de euros, y representa además el 9%del gasto público asociado a la actividad turística, con 1.047 millones.
José Luis Zoreda subrayó que a pesar de estas cifras, el turismo por primera vez en 2008 redujo su aportación al Producto Interior Bruto (PIB) en un 3,4%.
Destacó que el turismo registra “una senda de caída gradual desde 2003” y está perdiendo influencia en la economía canaria, lo que se refleja en datos como el descenso en un 7% en el gasto de los turistas extranjeros y la caída en un 13% en los visitantes peninsulares.
Las Islas han tenido “un paracaídas”, dijo también Zoreda, en el hecho de que los canarios han viajado entre islas y en el gasto efectuado por las administraciones públicas en las actividades relacionadas con el sector, que cifró en casi un 20%.
“Una lectura más allá de la crisis”
Zoreda dijo que trasladó este mismo viernes estas conclusiones al presidente canario, Paulino Rivero, a quien recomendó que vigile atentamente este sector porque el turismo ha ido perdiendo peso en la economía canaria desde hace 10 años “y esto tiene una lectura más allá de la crisis”.
Consideró que no se debe “echar un velo” sobre problemas que son estructurales ya que se está perdiendo competitividad en un tiempo al que se suma la crisis económica internacional, y esto exige medidas a corto y sobre todo, medio y largo plazo.
Tampoco puede Canarias plantearse el abaratar su producto, porque incurriría en pérdidas, por lo que a su juicio debe tender a vender “valor añadido”, un elemento diferenciador donde no influya el precio.
No vale con “pintar hoteles y bares”
Asimismo advirtió de que esta “reinvención integral” no debe limitarse “a un lifting de pintar hoteles y bares”, sino ofrecer “vivencias”, algo singular, un replanteamiento total de la oferta.
Para ello “es clave, estratégico y capital” una política de transporte aéreo en la que, añadió, la eliminación o reducción de las tasas debe ser abierta para todos los operadores, de manera que no se perjudique ni sufran discriminación o agravio comparativo justo las empresas que llevan 25 años operando en las Islas.
Agregó el vicepresidente de Exceltur que también hay que aumentar una política de protección de las playas, el principal atractivo turístico de las Islas, en la que se acentúe su valor lúdico.
Reiteró que “no vale transformar el hotel, el bar o la tienda de recuerdos si no se transforma el entorno” y aseguró que en este ámbito, los esfuerzos individuales no suman, al revés, se “descorazonan”, porque se trata “de un problema de fondo”.
“La crisis pasará pero el escenario internacional va a ser distinto, ya que cambiarán los hábitos y el concepto del lujo, y si España y Canarias quieren seguir siendo líderes tienen que reposicionarse”, añadió.
A su juicio, algunos destinos turísticos son comparables a “viejas carrocerías” de las décadas de los 60 y 70 del siglo XX que se han “tuneado” para ver “si tiramos para adelante”, cuando lo que hay que hacer “es cambiar de chasis”.