Volkswagen adjudica el nuevo Audi Q3 a la fábrica de Seat en Martorell
La fábrica de Seat de Martorell (Barcelona) fabricará finalmente el Audi Q3, según confirmó a Europa Press el presidente del comité de empresa, Matías Carnero (UGT), quien avanzó este anuncio que luego se hizo público, entre aplausos, en el XIII Congreso de UGT de Catalunya.
Seat no confirmó ni desmintió la noticia de la llegada del modelo, si bien la filial española de Volkswagen tiene previsto emitir este miércoles un comunicado oficial, explicó una portavoz de la compañía.
La decisión de Volkswagen de adjudicar este modelo a la planta catalana llega después de semanas de intensas negociaciones entre el Gobierno, la Generalitat y el consorcio alemán, que llevaba tiempo sopesando a qué planta enviar el modelo en base a criterios de costes y competitividad.
El anuncio es especialmente relevante para la plantilla de Seat, ya que aceptó en referéndum la congelación salarial para conseguir el Q3 y asegurar el futuro de la planta catalana.
La pasada semana fue significativa en el proceso de reuniones y acercamientos para captar el Q3 en Martorell. Primero, fue el propio el ministro Miguel Sebastián que, acompañado por el conseller de Innovación, Universidades y Empresa, Josep Huguet, viajó a Alemania el miércoles para convencer a la dirección de VW del potencial de la fábrica catalana. Regresó a España sin un compromiso, pero con una oferta sobre la mesa.
Un intento que el Gobierno acompañó dos días después, el viernes, con la concesión a Seat de cien millones de euros en ayudas, con cargo a los 800 millones de euros del Plan de Competitividad de Automoción. En ese momento, no obstante, el modelo todavía no estaba asegurado, aunque tanto sindicatos como administración se mostraban optimistas.
A partir de 2011
El Q3 se erige así como balón de oxígeno para Seat, en un momento especialmente complicado para la industria de la automoción en todo el mundo. La dirección de la filial española de VW había exigido a la plantilla la necesidad de congelar los salarios para contener costes, así como prolongar el ERE temporal para salvar el excedente de 1.500 empleos, que previsiblemente quedará ahora solventado con el nuevo modelo. El Q3 se empezará a producir en 2011, según los planes de la multinacional.
Martorell competía con otras plantas del grupo VW; la situada en Bratislava (Eslovaquia), y otra de Alemania, que se había relevado como firme candidata porque la plantilla estaba ejerciendo una presión fuerte para que el modelo se quedará allí.