Amanda Knox agradece a los italianos su apoyo antes de regresar a EEUU
ROMA, 4 (EUROPA PRESS)
Amanda Knox, la joven estadounidense que este lunes fue absuelta por el Tribunal de Apelación de Perugia del asesinato de la británica Meredith Kercher, ha agradecido con una carta a los italianos “su apoyo y respeto” durante los cuatro años que ha pasado en la cárcel, antes de regresar a Estados Unidos este martes.
Knox fue absuelta del delito de homicidio por la muerte de su compañera de piso, Meredith Kercher, asesinada en el mes de noviembre de 2007 con 43 puñaladas. También fue absuelto el ex novio de Amanda, el italiano Raffaelle Sollecito, acusado de haber participado en el asesinato. La sentencia de apelación revocó así el veredicto del tribunal de primera instancia de Perugia, que había condenado a 25 años a Sollecito y 26 años de cárcel a Amanda.
Knox ha agradecido en la carta, publicada por la Fundación Italia-Estados Unidos, a quienes la han “escrito, defendido y han rezado” por ella y ha destacado que muchos italianos “le han ayudado a sobrevivir con esperanza”.
Por su parte, el secretario general de la Fundación, Corrado Maria Daclon, ha destacado que Amanda quería “agradecer públicamente” a los italianos y a quienes la han apoyado “durante estos años de detención injusta” y ha subrayado que “pretende volver en el futuro a Italia”.
De hecho, Amanda tendrá que volver a Italia para escuchar la sentencia del Tribunal Supremo sobre el caso, puesto que al existir dos sentencias contradictorias, será el Tribunal Supremo quien decida qué tribunal tiene razón.
Daclon ha destacado que, durante el viaje desde Perugia a Roma, desde donde saldrá Amanda hacia Estados Unidos, la joven estaba “serena, aunque con todas las fuertes emociones que se pueden intuir para una persona que ve la libertad por primera vez después de cuatro años encarcelada injustamente en una celda”.
La joven Knox ha pasado las primeras horas de libertad con sus padres y ha llegado al aeropuerto de Roma-Fiumicino en torno a las 9:30 para después embarcar en un avión rumbo a Londres a las 11:00 horas. Desde la capital británica se dirigirá hacia Seattle.
La portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, ha asegurado que Estados Unidos “aprecia el cuidado escrupuloso con el que ha sido tratado el caso por el sistema judicial italiano” y ha añadido que la Embajada de Estados Unidos en Roma “continuará dando asistencia consular a Amanda y a su familia”.
LA FAMILIA DE MEREDITH
Por su parte, la familia de la víctima Meredith Kercher ha destacado que la sentencia de absolución fue “un shock” y que “dentro de un año”, cuando se pronuncie el Tribunal Supremo, podrán “saber la verdad”.
La familia Kercher ha subrayado también que “respetan la decisión de los jueces” pero “no comprenden cómo ha sido posible modificar completamente la decisión en primer grado”.
El hermano de Meredith, Lyle, ha destacado que “ha sido una jornada larga y difícil” y ha subrayado que “respeta al tribunal y el sistema de la justicia italiana”. Además, se ha preguntado “quién estaba con Rudy Guedé esa noche”, el único condenado por la muerte de Meredith.
Según ha declarado la hermana de Meredith, Stephanie, lo “más triste” de este caso es “no saber quién ha cometido de verdad este crimen” y ha subrayado que no pueden “perdonar a nadie, si no ha admitido tener culpa”, en referencia a la familia Knox.
Meredith Kercher fue encontrada muerta, medio desnuda y con 43 puñaladas en el cuello en la casa que Knox y ella compartían en Perugia en el mes de noviembre de 2007. El primer acusado fue Rudy Guede, un marfileño que fue condenado a 16 de cárcel. A Guede se le redujo la pena de cárcel por solicitar el juicio rápido, al mismo tiempo que se separaba su proceso del de Knox y Sollecito.
Según la primera reconstrucción de los hechos, Kercher se negó a participar en un 'juego sexual' por lo que Guede violó a Meredith y Knox la apuñaló con un cuchillo mientras Sollecito la sujetaba. No obstante, la defensa ha pedido la absolución de Knox y Sollecito porque, según afirman sus abogados, no hay móvil ni pruebas concluyentes de que los jóvenes estuvieran en el piso esa noche.