Argelia teme nuevos atentados de Al Qaeda tras la oleada del miércoles

Con el comienzo este jueves del fin de semana musulmán en Argelia, los cuerpos de seguridad del Estado se encuentran el “pie de guerra”, para hacer frente a cualquier eventualidad, según el diario L' Expresion, mientras que las embajadas occidentales llamaron a sus conciudadanos a estar vigilantes. De hecho, la policía argelina, horas después de la explosiones que el miércoles causaron en Argel 33 muertos y 57 heridos -algunos muy graves, según fuentes oficiales-, localizó un vehículo cargado con 500 kilos de dinamita delante de la residencia del director general de la seguridad, Alí Tunsi, en Argel.

El hallazgo se produjo en el barrio residencial de Hydra y en el vehículo, un Mercedes, los terroristas habían colocado una cisterna de las que habitualmente se usan para almacenar agua con los 500 kilos de dinamita en su interior, contactados a cuatro bombonas de gas butano. Una vez localizado el coche, los artificieros procedieron a desactivar los explosivos, según los detalles revelados por el diario argelino Echuruk, que este jueves publica una foto del vehículo.

El descubrimiento del coche se produjo gracias a uno de los múltiples avisos de bomba recibidos por la policía argelina en las últimas 24 horas, indicó una fuente policial. De entre la veintena de avisos que se han producido, sólo el del vehículo con los 500 kilos de dinamita resultó ser cierto, añadió la fuente.

“No vamos a estar en paz hasta que volvamos a poner el pie en nuestra querida Al Andalus”

“Da la impresión de que la banda de Al Qaeda en el Magreb” ha recibido nuevos refuerzos y equipamientos, y que posiblemente está ahora encuadrada por “emires” entrenados en las técnicas del “terrorismo moderno” aprendidas en Afganistán, según el diario L' Expresion. El presidente argelino, Abdelaziz Buteflika, reunió la noche del miércoles a los altos cargos de seguridad para reforzar el dispositivo de prevención en Argel, donde la mañana de este jueves se podía ver un mayor número de agentes que de costumbre, sobre todo, en algunas barriadas populares como Bab el Ued y El Harrach.

Lo que más ha llamado la atención de la población argelina, que contempló a través de Internet las fotos de los tres terroristas que el miércoles se inmolaron, fue el carácter suicida de su acción, manera a la que no estaba habituado el Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC), ahora reconvertido en Al Qaeda en el Magreb. “Hasta el miércoles creíamos que ese tipo de acción estaba reservado a lo que veíamos por televisión sobre Irak, pero ahora parece que nos ha caído encima, así que Alá nos proteja”, afirmaba desconsolado el propietario de un café.

La población se refiere al carácter “maléfico” del 11 y recuerda que los atentados de Nueva York se produjeron un 11 de septiembre, los de Madrid, un 11 de marzo y los de Argel, un 11 de abril. “Parece que los terroristas se han aficionado al 11, aunque también puede ser una simple coincidencia”, decía uno de los policías que protege los accesos al Palacio Gubernamental.

La prensa también comenta el comunicado que los salafistas argelinos dieron a conocer en Internet, en el que aparecen las fotos y los nombres de los tres terroristas suicidas y en el que se afirma: “no vamos a estar en paz hasta que volvamos a poner el pie en nuestra querida Al Andalus (Andalucía) y en el Quds (Jerusalén)...” La policía recordó este jueves a la población la existencia de varios números de teléfono a los que se debe llamar para advertir de cualquier hecho sospechoso.

Al clima de temor se unen las advertencias de las embajadas de EEUU, Gran Bretaña, Alemania y Francia que han aconsejado extremar la prudencia a sus nacionales. Esas misiones diplomáticas fueron las primeras en limitar los desplazamientos de su personal este fin de semana musulmán -el jueves y el viernes- en Argelia, como medida de prudencia.

En sus respectivas notas aconsejan a sus nacionales que, aunque no se debe caer en el alarmismo, eviten los viajes por el país, salvo si son estrictamente necesarios y, en tal caso, deben utilizar los vuelos internos de la compañía civil argelina. Sobre la posible relación entre lo sucedido en Argel y en Casablanca, donde tres terroristas se suicidaron y otro fue abatido por la policía el día anterior, el primer ministro argelino, Abdelaziz Beljadem comentó anoche: “el mal es el mal, ya sea de dimensión regional o mundial, y eso es lo que debe importarnos”.

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