Bush convoca a sus asesores tras el no a su plan de rescate
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se declaró este lunes “muy decepcionado” por el rechazo de su plan de rescate financiero en la Cámara de Representantes, pero agregó que “seguiremos adelante” para tratar de salvarlo.
En breves declaraciones junto al presidente de Ucrania, Víktor Yúschenko, Bush afirmó que se reunirá con su equipo económico para decidir los próximos pasos a seguir.
Asimismo, indicó, también se reunirá con los líderes del Congreso para determinar “el camino adelante”.
No obstante, insistió en que “atajaremos la situación económica de frente” para afrontar una crisis financiera que se presenta como la más grave desde la Gran Depresión de 1929.
Previamente, el portavoz de la Casa Blanca Tony Fratto afirmó que “no cabe duda de que el país atraviesa una crisis difícil que hay que atajar”.
La Casa Blanca había expresado su confianza en que la Cámara de Representantes aprobaría la Ley de Estabilización Financiera, que da al Tesoro hasta 700.000 millones de dólares para rescatar al sector financiero de la crisis.
Hasta muy poco antes de que comenzara la votación, Bush se mantuvo al teléfono para presionar a distintos legisladores sobre la necesidad de aprobar el proyecto de ley, sin el cual la Casa Blanca ha advertido de que la economía nacional podría padecer consecuencias gravísimas.
Sin embargo, los representantes rechazaron el proyecto por 205 votos a favor y 228 en contra, lo que originó que se desplomen los índices en la Bolsa de Nueva York y en el resto de mercados internacionales.
En una declaración a primeras horas de la mañana, Bush había urgido al Congreso a dar su visto bueno al plan, que impediría, en su opinión, que la crisis se extienda a toda la economía.
“El Congreso debe enviar una señal firme a los mercados” aprobando el proyecto cuyo coste se calcula en unos 700.000 millones de dólares, dijo Bush.