Chad no extraditará a los franceses
El presidente del Chad, Idriss Deby, reiteró este martes que el juicio por el caso de la organización no gubernamental El Arca de Zoé se hará en este país y cerró la puerta a que los franceses detenidos puedan responder ante los tribunales en su nación de origen. Mientras, los tres españoles que permanecen detenidos podrían ser puestos en libertad antes de 10 días, según el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, quien aseguró que “hay información” que apunta a ello.
“No está planteado que la justicia chadiana se declare incompetente en este proceso”, dijo Deby, en declaraciones difundidas por los medios locales de comunicación. Deby salió al paso de manifestaciones previas del presidente francés, Nicolas Sarkozy, quien abrió la posibilidad de que los seis franceses que están detenidos en esta capital sean extraditados y juzgados en su país de origen.
“La justicia se hará aquí, en el Chad”, insistió Deby. El caso está vinculado con el intento de traslado a Francia de 103 niños desde la localidad chadiana de Abéché, en una operación irregular que terminó con la detención de nueve franceses y siete españoles.
Los franceses eran seis miembros de la ONG que organizó el traslado y tres periodistas, mientras que los españoles eran los tripulantes del avión fletado para transportar a los menores a Francia, con vistas a su adopción. Las autoridades del Chad ya pusieron en libertad a cuatro azafatas españolas y a los tres periodistas franceses, pero aún quedan detenidos otros tres tripulantes españoles y los seis responsables de la ONG.
Sarkozy aseguró este martes que volverá a Chad “a buscar a todos” los franceses de la ONG, “hayan hecho lo que hayan hecho”. Ya en el viaje anterior -que realizó el pasado domingo a Chad- Sarkozy se mostró partidario de que los franceses detenidos sean juzgados en Francia, al amparo de un acuerdo judicial bilateral entre Francia y Chad firmado en 1976.
Pero Deby rechazó en sus declaraciones esa posibilidad y dijo que de momento no es necesaria la extradición de los franceses. “Al contrario -añadió- la justicia chadiana va a llegar al fondo” (del asunto).
Protestas en Yamena
La liberación de las cuatro azafatas españolas y de los tres periodistas franceses ha generado protestas en esta capital por parte de sectores opuestos a que los acusados formalmente hayan abandonado el país en el avión que trajo el domingo a Sarkozy. Al igual que Deby, el Abogado del Estado, Philippe Husseini, declaró a los periodistas que los acuerdos entre los dos países no permiten que el caso sea juzgado en Francia porque uno de sus artículos establece que no cabe extradición cuando el delito se ha cometido en todo o en parte del territorio del Estado requerido.
También el ministro chadiano del Interior, Ahmat Mahamat Bachir, insistió hoy en declaraciones publicadas por “Le Parisien” que no hay posibilidad de que extradición porque “los hechos se cometieron en Chad”. A su juicio, “por eso estos bandidos deben ser juzgados y condenados aquí. También deben purgar su pena en el país: que prueben nuestras prisiones. Y una vez que hayan purgado su pena, los expulsaremos de una vez por todas”.
En parecidos términos se manifestó el ministro chadiano de Justicia, Albert Pahimi Padacké, quien en declaraciones a la emisora France Info calificó como “inoportunas” las palabras de Sarkozy anunciando que volverá a Chad a llevarse al resto de sus compatriotas que están detenidos. “No es el presidente Nicolas Sarkozy quien decidirá lo que tiene que hacer la justicia chadiana, será Chad, con su aparato judicial, quien decidirá”, afirmó el ministro.
Frente a la situación de los franceses de la ONG responsable del traslado de los niños, el caso de los tres tripulantes españoles que quedan aún en este país tiene menores implicaciones, porque están acusados de complicidad con el delito de rapto de menores. Su abogado presentó este martes una solicitud de libertad provisional en favor de los tres españoles y el juez debe decidir en un plazo de diez días si la concede o no. Si la respuesta en positiva, los tres tripulantes podrían regresar a Madrid, al igual que las cuatro azafatas.
“Trabajando muy intensamente”
Precisamente, los tres españoles que permanecen detenidos podrían ser puestos en libertad antes de 10 días, según el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Bernardino León, quien aseguró que “hay información” que apunta a ello.
El número dos de la diplomacia española indicó que se está a la espera de que la declaración de los tres españoles pueda llevar a su puesta en libertad antes de que en diez días comience la instrucción del sumario. En su opinión, se está “trabajando muy intensamente” para la liberación y el regreso de los españoles y a pesar de que “hay información” que apunta a que esto se produzca, ha considerado que “no hay nada confirmado y hay que ser muy prudente”.
El ministro del Interior de Chad, Ahmat Mahamat Bachir, ha acusado a los dos pilotos españoles de haber estado al corriente de las intenciones de la ONG El Arca de Zoé, que pretendía trasladar a Francia a más de un centenar de niños del país, y de haber falsificado documentos.
Críticas del PP
Por su parte, el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, recibió este martes a los familiares y compañeros de los retenidos, a los que dio ánimos, en una reunión tras la que los asistentes valoraron la actuación diplomática española. La compañía aérea Girjet, para la que trabajan los detenidos, salió en defensa de sus trabajadores, insistió en que los dos pilotos desconocían las intenciones de esta asociación y remarcó que avisaron del cambio de la matrícula del avión.
Por otra parte, el PP continuó con las críticas al Gobierno por su gestión en este asunto y en esta ocasión fue la diputada popular Ana Torme la que ironizó que “va a tener que ser Sarkozy quien vaya a hacer gestiones y vuelva” con los tres tripulantes españoles. Torme recordó que su grupo parlamentario ha solicitado la comparecencia del presidente del Ejecutivo en el Congreso para explicar las gestiones con las autoridades del Chad para solventar esta “crisis”, en la que el Ejecutivo “ha hecho el ridículo” y los españoles se han sentido “humillados”.
El portavoz del PSOE en el Congreso, Diego López Garrido, rechazó las declaraciones del ex presidente del Gobierno José María Aznar en las que dijo sentirse “humillado” por la actuación de España. López Garrido dijo que Aznar es el último que puede hablar de “humillación” ante un Gobierno extranjero tras haber acudido durante su mandato a la Casa Blanca para “defender” no los intereses de España sino “a la administración Bush”.