Conservadores y liberaldemócratas se reúnen para negociar un acuerdo
LONDRES, 9 (Especial para EUROPA PRESS, Eva Martínez Millán)
El Partido Conservador británico y el Liberaldemócrata han acordado reunirse oficialmente este domingo a las 11.00 horas (una más en horario peninsular) para continuar evaluando posibilidades de colaboración, después de que las elecciones del jueves dejasen un Parlamento sin mayorías absolutas, con los 'tories' con el principal número de escaños, aunque a 20 de los 326 que marcan la hegemonía.
La cita de mañana continúa el proceso de negociaciones que formalmente ya ha comenzado, después de que el líder conservador, David Cameron, optase por invitar a la tercera fuerza, en lugar de intentar formar un Gabinete en minoría. Por el momento, está por definir la fórmula de colaboración, si bien el partido mayoritario quiere concluir cuanto antes el acuerdo.
En cualquier caso, las partes ya ha descartado una solución defintiva antes de lunes, a pesar de que los 'tories' son los más interesados en sellarla cuanto antes, especialmente para tranquilizar a la City, donde existe inquietud ante los efectos que esta incertidumbre sobre el futuro institucional del país podría representar para el déficit británico.
Por ello, a pesar de que el pacto integral no tendría lugar este fin de semana, los 'fontaneros' conservadores aspiran, al menos, a dar cuenta de unas pautas en el ámbito financiero para la apertura de los mercados el lunes. Además, ha trascendido la posibilidad de que el partido ofrezca incorporar liberaldemócratas a una virtual Administración liderada por David Cameron, concretamente la Secretaría del Tesoro, en la práctica, un número dos del ministro de finanzas, y las carteras de Interior y de Transportes.
No obstante, antes, los liberaldemócratas deberán autorizar a su líder, Nick Clegg, continuar con estas conversaciones. Para ello, este mismo sábado los 57 que han conseguido un asiento en Westminster se reúnen para evaluar el nuevo escenario, un encuentro marcado por protestas en la calle que reclaman al partido que recuerde su promesa de la reforma electoral.
'QUEREMOS HABLAR CON NICK'
Con carteles que rezan reivindicaciones como 'Votos justos ya' o 'Sé valiente' y cánticos como 'Queremos hablar con Nick', miles de personas, según la Policía, se han dado cita en el exterior del edificio para demandar cambios en el actual sistema de voto. Una demanda que Clegg apuntó esta mañana sería “fundamental” en cualquier acuerdo con los conservadores, si bien parece que se convertirá en uno de los puntos de fricción, puesto que, frente a la representación proporcional que los liberaldemócratas llevaron en su programa, los de David Cameron son reacios a tocar el actual modelo.
Para negociar, Clegg necesita la aprobación de al menos tres cuartos del Grupo Parlamentario y, posteriormente, la ratificación final de la Comisión Ejecutiva Federal que constituye la cúpula del partido. Aún así, todas las opciones permanecen abiertas y, de hecho, el líder habló ayer por la noche con el primer ministro, Gordon Brown, quien le habría trasladado su disposición a negociar, en caso de que el proceso con los conservadores fracase.
Precisamente este contacto, telefónico, habría estado marcado por la polémica puesto que, según ha trascendido del bando liberaldemócrata, el mandatario habría mantenido un tono duro, si bien por parte de los laboristas se ha asegurado que la conversación había sido “amistosa”.
REUNIÓN PRIVADA CLEGG-CAMERON
Pero antes de la reunión oficial que mantendrán hoy sus equipos, Cameron y Clegg mantuvieron una reunión privada a última hora de la pasada tarde en dependencias oficiales para evaluar personalmente la colaboración que aspiran a establecer.
La entrevista pudo desarrollarse íntegramente sin el conocimiento de los medios de comunicación británicos que, desde que comenzase el escrutinio del 6 de mayo, han seguido ininterrumpidamente a los líderes de los tres partidos, con guardias a la salida de sus domicilios incluidas.
Sin embargo, la BBC ha desvelado que Cameron y Clegg lograron mantener un reunión personal que, según fuentes conservadoras, se desarrolló en un ambiente “constructivo y amigable”, después de que ambos coincidiesen esta mañana en el memorial del 65 aniversario de la victoria contra los nazis que se celebró en Londres y en el que también pudieron ser retratados junto al primer ministro, Gordon Brown.