El Gobierno anuncia que abandonará el multimillonario proyecto laborista para que los británicos tengan DNI
LONDRES, 27 (Reuters/EP)
El nuevo Gobierno de coalición formado por conservadores y liberaldemócratas en Reino Unido anunció este jueves que abandonará en un plazo de cien días el multimillonario proyecto del anterior ejecutivo laborista de dotar a los ciudadanos del país de un documento nacional de identidad.
El Registro Nacional de Identidad, una base de datos que cuenta con la información biométrica sobre los propietarios de dichos documentos, también será destruido, de acuerdo con el primer proyecto de ley presentado ante el Parlamento por el nuevo Gobierno.
La medida supone el fin del proyecto, cuyo coste se cifraba en unos 5.000 millones de libras (más de 5.900 millones de euros) para la próxima década, promovido por los laboristas, que habían argumentado que la posesión de carnés de identidad era vital en la lucha contra la delincuencia y el terrorismo.
“El programa de documentos de identidad derrochador, burocrático e intrusivo representa todo lo que ha estado mal en el anterior Gobierno en los últimos años”, defendió el viceprimer ministro, Nick Clegg. “Adoptando la acción rápida de abandonarlo, estamos dejando claro que este Gobierno no sacrificará la libertad de sus ciudadanos por los proyectos favoritos de algunos ministros”, aseguró.
Los carnés, de 30 libras (casi 35,5 euros) y que contenían detalles personales, la huella dactilar y una foto de la cara, formaban parte de uno de los proyectos biométricos más ambiciosos a nivel mundial. Inicialmente, el objetivo era que estos carnés fueran obligatorios para todos los británicos pero ante la posición de los defensores de las libertades civiles y los crecientes costes, el Gobierno laborista cedió a que fueran voluntarios.
Tanto los conservadores como los liberaldemócratas habían prometido que abandonarían este proyecto ante de las elecciones del pasado 6 de mayo. Ahora, una vez en el poder, los dos partidos quieren que el Parlamento apruebe una ley para agosto como muy tarde que invalide estos carnés. Aquellos que ya se han hecho con uno de ellos no recibirán de vuelta su dinero.
Según el Ministerio del Interior, esta acción ahorrará a los contribuyentes 86 millones de libras (101,7 millones de euros) en los próximos cuatro años y evitará costes por 800 millones de libras (945,8 millones de euros) en la próxima década.