Mueren 23 civiles palestinos más e Israel divide el territorio de Gaza
Al menos 23 palestinos, todos ellos aparentemente civiles, han muerto este lunes en distintos bombardeos israelíes en la franja de Gaza, invadida por el Ejército hebreo desde el pasado sábado, informaron fuentes médicas palestinas.
Trece de ellos murieron en el barrio de Zeitún, en el sur de la ciudad de Gaza, cuando su casa fue bombardeada por un tanque durante una incursión desde el antiguo asentamiento de Netsarim, a tres kilómetros de la capital de la franja y donde se han asentado las tropas, precisó el responsable del servicio de emergencias en Gaza, Moawiya Hasanein.
Otros siete miembros de la misma familia murieron cuando su vivienda en el campo de refugiados de Shati fue alcanzada por un proyectil lanzado por un barco de guerra israelí desde la costa mediterránea de Gaza, agregó.
Además, otros tres civiles murieron en un bombardeo en el poblado de Beit Hanún, en el norte de la franja de Gaza, según Hasanein.
Más de setenta palestinos han muerto desde que el pasado sábado las tropas y tanques israelíes invadieron la franja de Gaza, apuntaron las fuentes médicas.
Las fuerzas israelíes han dividido Gaza en tres para evitar que las milicias palestinas reciban refuerzos, lo que impide el libre movimiento dentro del territorio a su millón y medio de habitantes.
Los soldados israelíes han mantenido varios intercambios de fuego con milicianos palestinos desde que entraron el pasado sábado en Gaza, principalmente en el este de la ciudad de Gaza.
Pese a la invasión, los grupos armados de Gaza han logrado este lunes lanzar ocho cohetes contra el Estado judío, aunque el número es menor que antes de la incursión.
En diferentes comunicados, las Brigadas de Ezedín Al Kasam, brazo armado de Hamás, reivindicaron este lunes el disparo contra los blindados israelíes de granadas antitanque y proyectiles de mortero.
Además, aseguraron que han usado por primera vez un cohete, bautizado Tandem, que ha destruido varios vehículos armados israelíes en el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de Gaza.
El objetivo de la ofensiva israelí es “asestar un duro golpe” al movimiento islamista Hamás y las otras milicias que actúan en Gaza para minimizar los ataques con cohetes lanzados desde ese territorio palestino contra el Estado judío, según el Ejército.