La UE pide a Marruecos mejorar el respeto a los derechos humanos en el Sáhara
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha respaldado este domingo los esfuerzos de la ONU para buscar una solución “justa, duradera y aceptable” para todas las partes en el conflicto del Sáhara Occidental, y ha instado a Marruecos a mejorar la situación de los derechos humanos y de sus defensores.
En rueda de prensa en el Palacio de Carlos V de la Alhambra tras concluir la I Cumbre entre la UE y Marruecos, Van Rompuy ha recalcado el interés europeo en que los “esfuerzos de modernización” marroquíes tengan éxito y en ver “avances en el respeto a las libertades fundamentales y los derechos humanos”.
A su lado, el primer ministro marroquí, Abás el Fasi, ha defendido una amplia autonomía para el Sáhara Occidental y ha subrayado que no se puede destruir la integridad territorial de Marruecos por “uno o dos” casos de violaciones de derechos humanos que son sancionados, algo que no ocurre, ha denunciado, en los campos de refugiados saharauis en Tinduf (Argelia).
En la declaración final de la Cumbre, la UE y Marruecos dedican un párrafo a este conflicto en el que se limitan a apoyar los esfuerzos del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y del enviado especial, Christopher Ross, con el fin de encontrar una “solución política definitiva, duradera y aceptada” por todas las partes.
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido preguntado por el mensaje enviado por el Rey Mohamed VI a la cumbre, en el que reclama un “arreglo político” para solucionar el “diferendo artificial” en torno a la integridad territorial de Marruecos, otorgando una “amplia autonomía” al Sáhara Occidental respetando “la integridad nacional y territorial” del país magrebí.
Apuesta de España por Naciones Unidas
Sin comentar esta iniciativa, Zapatero ha subrayado que la posición de España está ya “consolidada”, ha apostado por Naciones Unidas y ha estimado que “el camino del entendimiento es el camino de la solución”.
España, ha dicho, mantendrá su diálogo “franco y constructivo ” con Marruecos.
Van Rompuy ha lamentado el estancamiento de la situación y ha insistido en que la UE confía en que las negociaciones que marroquíes y saharauis han mantenido en Austria y en las cercanías de Nueva York lleguen a buen puerto.
Pero las palabras del primer ministro marroquí no permiten augurar un pronto acuerdo.
Tras recalcar que las últimas resoluciones de Naciones Unidas no hablan de un referéndum para la independencia sino de un acuerdo mutuamente aceptable, ha insistido en que Marruecos ha presentado una iniciativa para la autonomía del Sáhara mientras que “las otras partes no han presentado nada”.
Críticas a Argelia
A su juicio, a Argelia “le viene bien que no haya ni guerra ni paz, que no haya solución” y “si no hubiera alambres en los campos de Tinduf” los saharauis volverían a Marruecos.
Según su descripción, cuando los habitantes de los campamentos argelinos visitan a sus familiares en El Aaiún, la capital del Sáhara Occidental, llegan felices y se van llorando, porque en los “inhumanos” campos de Tinduf no hay libertad, sino “trabajos forzados”.
Ha reconocido que en Marruecos hay “casos” de violaciones de derechos humanos, pero ha garantizado que, como en Europa, los funcionarios que los cometen son apartados de su puesto y sometidos a un tribunal penal.
Marruecos, ha dicho El Fasi, ha abrazado los valores fundamentales de la UE: “la libertades, la democracia, el sufragio universal, los derechos humanos, la soberanía de la nación y los derechos económicos y sociales”.
Van Rompuy ha dejado claro que la UE seguirá implicada en “los aspectos humanitarios” del conflicto saharaui y ha considerado que se ha lanzado una señal “clara e inequívoca” al país vecino, porque los europeos saben cuáles son los problemas y los avances en materia de derechos humanos.
Por su parte, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha confiado en que Marruecos continúe con las reformas sociales y económicas, de la justicia y de la protección “reforzada” de los derechos humanos.