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“Hay dolores que deben ver la luz, no pueden ocultarse”

Presentación este jueves del poemario de Eugenia Paiz.

Esther R. Medina

Santa Cruz de La Palma —

La presentación de Expiación, el primer poemario de la periodista palmera Eugenia Paiz, que ha tenido lugar este jueves en la Casa Salazar de Santa Cruz de La Palma, se convirtió en un acto cargado de emoción y reivindicativo, en el que Antonio Abdo puso voz a unas convulsas composiciones de fuerza conmovedora.

El libro, editado por Ediciones La Palma, dentro de su colección Ministerio del Aire, es la primera obra literaria de Eugenia Paiz, redactora de Diario de Avisos, y nace como “tributo” a su hija Rebeca, que es autista, y también “a la verdad”.

El periodista David Sainz, compañero de trabajo de Eugenia en el decano de la prensa de Canarias, intervino en el acto y confesó que se sentía “orgulloso” de “haberla convencido” para que publicara el poemario, en el que, aseguró, “hay verdad, y lo sé porque llevo 15 años compartiendo mesa de redacción con ella”. Expiación, dijo, “es un relato existencial en el que se rasga de un zarpazo el velo que oculta la existencia, se pasa el cepillo a contrapelo a la vida”.

La escritora Elsa López, editora de la obra, resaltó la valentía de Eugenia, una madre que “se ha caído y se ha vuelto a levantar contra el mundo por amor a su hija Rebeca”. Reconoció que el género literario supone desnudarse ante los demás, es “hacer un striptease” pero, remarcó, “hay dolores que deben ver la luz, no pueden ocultarse”. “Lo que comunica este libro, que hay que desvelar lentamente, es desgarrador”, afirmó.

Eugenia, emocionada, no ocultó que le gusta “destruir secretos y contar verdades, porque creo que es purificador para todos”. Cerró el acto con la lectura de uno de sus poemas y con un grito de amor: “Reivindico para Rebeca cada piedra de esa calle”.

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