La ausencia de la bandera de Venezuela marca el desfile
MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
Los silbidos y abucheos al presidente del Gobierno y la ausencia de la bandera de Venezuela han marcado este martes el desfile con motivo del Día de la Fiesta Nacional, que ha estado presidido por los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, y en el que han desfilado más de 3.000 militares, 153 vehículos y unas 50 aeronaves de las Fuerzas Armadas.
Los gritos de 'Zapatero, dimisión' por parte del público más cercano a las tribunas de autoridades, en la Plaza de Lima de Madrid, comenzaron a escucharse media hora antes de que el jefe del Ejecutivo llegara al lugar desde el que las más altas autoridades del país asistieron a la parada militar.
Así, poco después de las 10.00 horas llegaron los primeros silbidos, que se hicieron más audibles cuando el narrador pronunció el nombre del presidente del Gobierno, al anunciar que recibía a los Reyes, y se mantuvieron en el momento en el que Zapatero procedía a saludar a Don Juan Carlos y Doña Sofía, y hasta que sonaron los primeros acordes del himno nacional. También continuaron después de que el Rey saludara a los miembros del Gobierno e incluso en el homenaje a la bandera nacional, que llegó desde el aire a cargo de un equipo de la Patrulla Acrobática Paracaidista del Ejército del Aire.
Este es el quinto año consecutivo en que Zapatero es recibido de esta forma en la Fiesta Nacional. Sin embargo, a diferencia de otros años, los abucheos y peticiones de “dimisión” para el presidente se repitieron en uno de los momentos más emotivos de la parada: durante el homenaje a los que dieron su vida por España, en el que participaron familiares de militares y guardias civiles fallecidos en acto de servicio en el último año.
Fuentes de la organización han señalado que los abucheos se produjeron en puntos “muy localizados, muy concretos” y por parte de “algunos pequeños grupos organizados” que habían sido convocados a través de las redes sociales, como facebook y twitter, y de mensajes de texto vía teléfono móvil
EL ABANDERADO VENEZOLANO, “INDISPUESTO”
Pero el desfile militar de este año también será recordado por la ausencia de la bandera de Venezuela, que no desfiló por el Paseo de la Castellana, pese a que este país había sido invitado a participar junto a otras ocho naciones iberoamericanas con motivo del Bicentenario de sus independencias, que se celebra este año.
Pese a que desde un primer momento se anunció que serían nueve las enseñas nacionales que desfilarían por el Paseo de la Castellana, sólo se pudo ver a las banderas y estandartes de Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, El Salvador, Paraguay, Bolivia y México.
Según explicaron fuentes de Defensa, el Departamento que dirige Carme Chacón recibió esta mañana entre las 9.00 y las 9.30 horas --una hora antes de que comenzara el desfile-- una llamada oficial por parte de autoridades diplomáticas venezolanas en las que se informaba de que el abanderado venezolano no podría desfilar porque “estaba indispuesto”.
La elección de la persona encargada de portar la enseña nacional corresponde a las Embajadas, a través de las que se cursan las invitaciones para participar en el desfile. Lo habitual es que sea un militar del país correspondiente que resida en España y, de hecho, suele ser el agregado militar de la legación diplomática, explicaron las fuentes.
MINISTROS, DIPUTADOS Y ALTOS CARGOS
La parada militar ha vuelto a discurrir este año por el Paseo de la Castellana, con la tribuna de autoridades situada en la Plaza de Lima, junto al Estadio Santiago Bernabeu. La trayectoria fue modificada el año pasado debido a las obras en la Plaza de Colón y este año se ha mantenido el nuevo emplazamiento dado que, según ha explicado el Ministerio de Defensa, la nueva situación de Colón --con una fuente en medio-- dificulta el desfile.
Los Reyes llegaron junto a los Príncipes de Asturias, Don Felipe y Doña Letizia, este año vestida con pantalón. También estuvieron acompañados por los Duques de Palma y la Infanta Elena.
Por parte del Gobierno, han estado presentes todos los ministros a excepción de los de Justicia, Francisco Caamaño, Industria, Miguel Sebastián, y Vivienda, Beatriz Corredor. El año pasado también acudieron 14 de los 17 miembros del Ejecutivo.
Además, han asistido los presidentes de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; Cataluña, José Montilla; Castilla-La Mancha, José María Barreda; Extremadura, Guillermo Fernández Vara; Galicia, Alberto Núñez Feijoo; Navarra, Miguel Sanz, y Cantabria, Miguel Angel Revilla, así como el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas. También acudió la consejera vasca de Educación, Isabel Celaá, en representación del lehendakari Patxi López.
Entre los representantes de las más altas instituciones del estado estaban el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, general del Aire José Julio Rodríguez Fernández; el presidente del Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Dívar; la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, y los presidentes del Congreso y el Senado, José Bono y Javier Rojo.
CONVERSACIONES ANTES DEL DESFILE
Antes de la llegada de los Reyes y de que diera comienzo el desfile, los asistentes tuvieron ocasión de saludarse e intercambiar palabras. Se pudo ver al presidente del Gobierno charlando con el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, así como un corrillo formado por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, la presidenta del Tribunal Constitucional y los presidentes de las dos Cámaras del Parlamento.
Una vez llegaron los Reyes, y tras recibir honores militares, Don Juan Carlos pasó revista a la fuerza y, junto a Doña Sofía, saludó a las autoridades. El monarca se detuvo unos instantes con la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez.
Después, y tras el izado y homenaje a la bandera y el posterior tributo a los que dieron su vida por España, comenzó el desfile terrestre y aéreo. Como novedad, este año se pudo ver por primera vez el nuevo vehículo blindado RG-31, que ha sustituido en Afganistán a los antiguos BMR con el objetivo de mejorar la seguridad de las tropas españolas. También podrá verse por primera vez otro nuevo vehículo adquirido por el Ministerio de Defensa, el Lince.
Este año la parada ha contado con “en torno a 800 efectivos” menos que el año pasado, lo que supone un 19% menos. Mientras tanto, la cifra de vehículos, 153 en total, se reduce en 56 unidades, un 26,8% menos que en el anterior desfile. Finalmente, el número de aviones y helicópteros se ha visto rebajada en un 13,7%, al pasar de las 58 aeronaves de 2009 a las 50 que se exhibieron en vuelo este martes en el acto conmemorativo del 12 de octubre.