Aznar dice que no sirve para ser “parapeto de la desvergüenza de nadie”
ESTEPONA (MÁLAGA), 18 (EUROPA PRESS)
El expresidente del Gobierno José María Aznar ha afirmado que no sirve “para ser parapeto de la desvergüenza de nadie y menos para los que están en el Gobierno de España” y ha censurado que el día en que se conoció que el régimen libio “bombardea a la población civil con bombas de racimo vendidas por España” se monta “un follón para decir que Aznar es amigo de dictadores”.
Así, ha considerado que se ha vivido una “historia de manipulación lamentable” y ha admitido que le llama la atención que después de haber dejado el Gobierno hace siete años y renunciar voluntariamente a presentarse más veces “muchos pierdan el día en ocuparse de mí con la mayor intensidad posible”.
“Gadafi, en 2003, cuando vio lo que le pasaba a un dictador peor que él --en referencia a Saddam Hussein--, todavía quiso mostrarse amigo, cooperar con la comunidad internacional, y algo debió conseguir para que en 2007 el Gobierno socialista le vendiese bombas de racimo”, ha manifestado, y se ha preguntado si es que el Ejecutivo “vende bombas de racimo a los enemigos y no a los amigos”.