La 'kale borroka' se intensifica tras el fallo del Supremo
Los actos de violencia callejera continuaron la madrugada de este docon un ataque a la sede del PSE/EE en Zumarraga (Guipúzcoa), incidentes en diferentes localidades vascas y en Pamplona y con varios detenidos por las fuerzas policiales.
Efectivos de la Ertzaintza detuvieron la madrugada de este domingo a un menor de edad en la localidad vizcaína de Mungia por protagonizar desórdenes públicos.
Un grupo de jóvenes se concentró en dicho municipio en torno a las tres de la madrugada para manifestarse, si bien, debido a la oposición de la policía, causaron varios incidentes y lanzaron diferentes objetos a los agentes, quienes respondieron cargando contra los alborotadores.
Los manifestantes lanzaron piedras y botellas a la policía, que tuvieron que apropiarse de material antidisturbios para disolver la concentración.
También se registraron la pasada noche cargas policiales en Markina (Vizcaya), y por el mismo motivo: agentes de la Ertzaintza impidieron una manifestación.
Se produjeron incidentes en la zona centro, ya que los manifestantes volcaron contenedores y levantaron una barricada de neumáticos, que rociaron con líquido inflamable, de modo que la policía vasca tuvo que proceder a la disolución de la convocatoria.
Los altercados en Pamplona de la pasada madrugada se saldaron con la detención de dos jóvenes, acu sados de desórdenes públicos.
Los incidentes ocurrieron en el casco viejo de la capital navarra, donde los manifestantes detenidos, de 16 y 19 años, arrojaron piedras a la policía y uno de ellos agredió a un funcionario y opuso resistencia a la autoridad.
Estos actos de kale borroka, que la policía relaciona con la organización Segi, siguieron hasta las 4:00 de la madrugada.
El PSE/EE sufrió estos actos de violencia callejera en sus sedes de Zumarraga e Iurreta.
Un grupo de desconocidos arrojó líquido inflamable contra la primera de ellas, pero no causaron daños de relevancia, y otros alborotadores lanzaron pintura contra la sede socialista de Iurreta.
''Batasuna no está preparada para la paz''
El dirigente del PSE/EE Miguel Buen aseguró que “con cada ataque, con cada cóctel molotov y cada atentado, Batasuna demuestra que no está preparada para la paz”.
Añadió que la formación ilegalizada “sigue aún tutelada por ETA” y pidió al líder de ese partido, Arnaldo Otegui, que detenga esta “sinrazón”.
El delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, expresó su “hastío” y “rechazo” a tales actos de violencia en las calles y a los representantes de la “denominada izquierda abertzale”, quienes, a su juicio, “siguen callados”.
Las manifestaciones de kale borroka acontecidas la pasada madrugada se suman a las que ocurrieron durante la del sábado.
Hubo entonces ataques a entidades bancarias, desórdenes públicos y las consiguientes cargas policiales en varias localidades vascas.
Fuentes policiales apuntaron que los incidentes podrían tener relación con las decisiones del Tribunal Supremo de declarar organizaciones terroristas a Jarrai, Haika y Segi y de ordenar la detención de 23 integrantes de ellas. Cuatro ya han sido apresados por la Policía.
El portavoz del PNV, Íñigo Urkullu, manifestó su “preocupación” ante la posibilidad de que la decisión del Supremo se haga extensible a otras causas pendientes y consideró que hay “impulsos políticos” en la actuación de la Justicia.
La secretaria de Política Autonómica del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, pidió al Gobierno “celeridad” para detener a los otros 19 integrantes de las organizaciones antes citadas, mientras que el secretario general de este partido en el País Vasco, Carmelo Barrio, opinó que la sentencia del Supremo ayuda más a la “neutralización definitiva de ETA”.
El coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, afirmó que Jarrai, Haika y Segi “no tienen cabida” en la sociedad democrática, aunque criticó la decisión del Tribunal Supremo al señalar que “ha sido manifiestamente mejorable”.
Mientras, representantes del Movimiento Pro Amnistía, como Juan María Olano y Julen Larrinaga, concluyeron que la sentencia del Tribunal “pone las bases para perpetuar el conflicto en su concepción más cruda”.