El PP se erige como “bisagra de la gobernabilidad”
Rajoy advierte de que el nacionalismo supone un freno para el progreso económico
VILA-SECA (TARRAGONA), 13 (EUROPA PRESS)
La presidenta del PP de Cataluña, Alicia Sánchez Camacho, ha sostenido que el PP puede erigirse como “la bisagra de la gobernabilidad” tras las elecciones catalanas después de que el barómetro del CIS dejase a CiU a nueve escaños de la mayoría absoluta, empatada con la suma de las tres fuerzas del tripartito.
Durante su intervención en un mitin en Vila-Seca junto al presidente del partido, Mariano Rajoy, y ante cerca de mil personas, Camacho ha defendido que las últimas encuestas demuestran que el tripartito no podrá reeditarse, por lo que ha asegurado que el PP puede “decantar Cataluña hacia la libertad, y no hacia la independencia y la mala gestión”.
La candidata del PP a la Presidencia de la Generalitat ha destacado que el barómetro señala también que la mayoría de los catalanes no se siente nacionalista y defiende una Cataluña de la libertad, ante lo que ha augurado que los populares lograrán unos buenos resultados el 28 de noviembre.
EL MITIN “MÁS IMPORTANTE” EN TARRAGONA
Rajoy ha asegurado que ve cada día mejor a su candidata, y que actos como el de Vila-Seca, que ha considerado como “el más importante” al que ha asistido nunca en la provincia de Tarragona, le hacen estar confiado en las posibilidades de obtener un buen resultado el 28 de noviembre.
Pese a la voluntad de ser decisivos, el PP ha vuelto a marcar distancias con CiU, y aunque tanto Camacho como Rajoy han celebrado que, a su juicio, la federación emule sus propuestas en materia económica, ambos han advertido de que su nacionalismo es perjudicial para Cataluña.
Rajoy ha asegurado que “el nacionalismo cuesta mucho dinero”, por lo que ha advertido del riesgo que se perjudique a la política económica catalana por la voluntad de imponer cuestiones identitarias que, según él, no interesan.
Por su parte, Camacho ha cargado contra el tripartito por “obligar a los directores de las escuelas a vigilar si los profesores hablan catalán o no”, y ha reprochado al presidente de la Generalitat, José Montilla, que exhiba a su número tres, Celestino Corbacho, hablando de la unidad de España, a la vez que impulsa esa política lingüística en las escuelas.
