El PSOE no quiere sobresaltos en el Congreso e intenta atar las votaciones con IU- ICV, ERC, BNG y CC
El PSOE ha decidido reforzar sus contactos con formaciones minoritarias del Congreso para intentar sacar adelante sus iniciativas y evitar posibles sobresaltos en las votaciones. Aunque no renuncia a sellar acuerdos con ningún partido, el Grupo Socialista centrará sus esfuerzos en atar las votaciones con IU, ICV, ERC, el Bloque Nacionalista Galego y Coalición Canaria, según informaron fuentes parlamentarias.
Mientras el PNV mantenga su actitud de distanciamiento con el PSOE en Madrid, los socialistas han optado por buscar mayorías con otras formaciones minoritarias teniendo en cuenta que los 169 diputados socialistas, unidos a los cinco del grupo que comparten IU, ICV y ERC, los dos del BNG y los otros dos de Coalición Canaria, ya suman un total de 178 diputados, es decir, dos más de los 176 en los que se fija la mayoría absoluta. Además, a ellos podrían añadir puntualmente a los dos diputados navarros de UPN y Nafarroa Bai, ambos en el Grupo Mixto.
Cada uno a su estilo
El diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, reveló este miércoles por la mañana que los socialistas se han comprometido a reunirse con IU-ICV todas las semanas para preparar la semana parlamentaria. La idea es tener claros los temas que son susceptibles de negociación, saber los que se aprobarán y se rechazarán, tanto en el Pleno como las comisiones.
La recuperación de esta fórmula que el PSOE ya utilizó en la anterior legislatura con sus socios preferentes de IU e ICV, tiene como objetivo poder negociar teniendo en cuenta todas las iniciativas que se debatan cada semana y evitar, según palabras de Llamazares, que cada votación sea “una tómbola”.
Durante la mayor parte de la anterior legislatura este método se aplicaba también con ERC, una formación con la que los socialistas también quieren tener abiertos todos los canales de comunicación. Los republicanos están dispuestos a ello, pero no ven necesario volver a institucionalizar los encuentros semanales con el PSOE y prefieren seguir negociando iniciativa por iniciativa.
En cualquier caso, tal y como ya advirtió este miércoles el portavoz de ERC, Joan Ridao, al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Pleno del Congreso, los independentistas no servirán de “salvavidas” al PSOE mientras no se concrete un acuerdo de financiación satisfactorio para Cataluña.
El PSOE también intentará evitar derrotas reforzando la colaboración con dos partidos del Grupo Mixto: el Bloque Nacionalista Galego y Coalición Canaria, que tienen dos diputados cada uno, y que ayer ya ayudaron a los socialistas en las votaciones que tuvieron lugar en el Pleno.
Así, la abstención del BNG y el voto en contra de Coalición Canaria fueron claves, por ejemplo, para que ayer no saliera adelante un punto de una moción del PP en la que instaba al Gobierno a recuperar el antiguo Plan Prever, una de las medidas que proponían los 'populares' para paliar las consecuencias de la crisis en el sector del automóvil.
Esta estrategia no va a ser óbice para que el PSOE busque también consensos con el resto de partidos con representación en el Congreso, con los que seguirá negociando como hasta ahora, es decir, tema por tema.
Así será con CiU, que no quiere variar la dinámica con la que ha funcionado hasta ahora y continuará pactando con el PSOE las iniciativas que considere oportunas y rechazando las que no le convenzan, según confirmaron los nacionalistas catalanes.
Alonso se implica en los contactos
En esta idea de redoblar los esfuerzos negociadores no sólo se implicará el secretario general del Grupo Socialista, Ramón Jáuregui, que hasta ahora se venía ocupando de la gestión de las sesiones plenarias, sino que también participará activamente el portavoz, José Antonio Alonso, que fue quien se reunió hoy con Gaspar Llamazares y se ha comprometido a mantener abiertas líneas de comunicación con Ridao (ERC) y Francisco Jorquera (BNG).
Con el PNV, el partido que, junto al BNG posibilitó la aprobación de los últimos Presupuestos Generales, las relaciones se han enfriado tras las elecciones vascas y el posible pacto entre socialistas y populares para la investidura de Patxi López. No obstante, los nacionalistas aseguran que no por ello van a caer ahora en posiciones disparatadas y en ese sentido Alonso ha ofrecido a Josu Erkoreka (PNV) un diálogo fluido sobre los asuntos a tratar en el Congreso.