Rajoy advierte de que si Zapatero no rompe con Batasuna ''no hay nada que hacer''
El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró este martes que apoyará al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, si éste “quiere volver” al Pacto Antiterrorista, pero recalcó que si no rompe con Batasuna “no hay nada que hacer” porque “de ninguna manera” apoyará “una negociación política” con ETA.
En declaraciones a Punto Radio, Rajoy añadió en que, en la reunión que mantendrá el próximo viernes con Zapatero en el Palacio de la Moncloa, insistirá en que “no se puede negociar políticamente” con ETA, en que Batasuna “no se puede presentar a las elecciones mientras ETA no se disuelva”, y en que el Fiscal General del Estado, Cándido Conde-Pumpido, “tiene que trabajar para evitar” que la formación ilegalizada se presente a los comicios.
Rajoy aseguró que, en el proceso abierto tras el alto el fuego de ETA, Zapatero está “entendiéndose con Batasuna y no con el PP”, y subrayó que no puede aceptar “de ninguna manera” que el Gobierno “hable” con una organización terrorista del futuro de Navarra o de la autodeterminación porque “esas cosas las decide la soberanía nacional”.
“El presidente del Gobierno todo este tema lo lleva de la mano con Batasuna, no sé si con el PNV y luego tiene en contra al PP, a las víctimas del terrorismo y a sectores muy importantes de la sociedad”, agregó Rajoy.
Rajoy aseguró que a lo largo de su vida política ha “demostrado” que es “capaz de pactar”, pero añadió que “no es fácil acordar con quien no quiere acordar, sino imponer sus criterios después de haber roto un pacto” como el Acuerdo por las Libertades y contra el Terrorismo suscrito por el PP y el PSOE.
Recordó que el Pacto Antiterrorista decía a ETA que el “único objetivo al que puede aspirar es a disolverse” para poder “hacer política como los demás” y que si no lo hace, se le aplicará “todo el peso de la ley y del estado de derecho”.
“Ahora se cambia esto y entramos en una negociación política”, continuó Rajoy, quien dijo que, ante esta situación, tiene dos opciones: “estar de acuerdo” y ponerse “detrás” del presidente del Gobierno en algo que le parece “disparatado”, o “desde fuera, decirle, mire usted, yo esto no lo puedo aceptar”.
“Ahora, si el presidente del Gobierno quiere volver al Pacto, yo, desde luego, volveré al Pacto. Lo que no puedo es aceptar aquello en lo que no creo”, precisó.