El Cabildo vuelve a frenar el nuevo PGOU de Mogán
El nuevo Plan General de Ordenación que pretende sacar adelante el Ayuntamiento de Mogán, tras haber desistido del anterior por indicaciones del Gobierno canario, vuelve a estar plagado de irregularidades en su Avance, así como en su Informe de Sostenibilidad Medioambiental.
En un extenso estudio del Servicio de Planeamiento del Cabildo de Gran Canaria, al que ha tenido acceso CANARIAS AHORA tras su remisión en febrero por parte del Ayuntamiento, los técnicos determinan que el planeamiento de Mogán pretende reconvertir en exceso suelo turístico en zonas residenciales, sin aparente justificación.
Las irregularidades del documento -también remitido al Gobierno canario para su análisis- sobrepasan el medio centenar de errores que debe subsanar el equipo redactor para su adecuación al Plan Insular de Ordenación de Gran Canaria (PIO-GC), y de entrada se pide al Ayuntamiento que especifique el número de plazas turísticas con las que cuenta.
El Cabildo estima necesario no solo saber “de manera explícita” el número de plazas turísticas actuales y “el número de plazas nuevas propuestas para los próximos diez años”, sino sobre todo, “el número de plazas que pasan de turísticas a residenciales en el PGO informado conforme a los argumentos expuestos a tal fin en el apartado 2.1 del presente”.
En el mismo, se analiza el exceso histórico de las camas turísticas previstas en las Normas Subsidiarias de Mogán de 1987 -casi las mismas que en San Bartolomé de Tirajana, 149.474 sobre una superficie de 1.580,54 hectáreas y una densidad bruta máxima de 25 viviendas por hectárea, cuya ejecución apenas ha alcanzado un 20% de lo previsto- y según el PIO-GC, se recomienda la reducción del suelo turístico a un tercio del mismo.
El Avance del PGOU, a juicio del Cabildo, no concreta esa capacidad máxima de acogida urbanística del territorio costero, aboga por una merma genérica del 45% al pasar de 1.580 a 835 hectáreas de ámbito turístico, pero deja sin reflejar al detalle qué cantidad de los suelos turísticos provenientes de las Normas Subsidiarias no figuran como tales en el PGO en trámite al haber sido recalificados como suelos residenciales.
Este dato que no ofrece el Avance se estima significativo por parte de la Consejería insular de Política Territorial en el informe fechado el 25 de julio pasado, con el fin de valorar la auténtica disminución de la ocupación del suelo moganero por la industria turística.
El limbo entre lo residencial y lo turístico
El informe del Cabildo establece que el Avance del PGOU tampoco refleja con claridad el número de plazas turísticas y su reducción real, debido al limbo interesado que existe entre el suelo turístico y el suelo residencial en las Normas Subsidiarias de 1987, fruto “de una interpretación interesada del contenido de las NNSS materializada sobre ámbitos de tolerancia para la mezcla de ambos usos de forma contraria a lo que establece el PIO-GC a través de los Planes Parciales previstos para su desarrollo”.
El Cabildo también cuestiona el crecimiento poblacional del municipio en el periodo de vigencia del PGOU, al tener una capacidad de acogida mayor -exceso de suelo residencial- a los datos reflejados en la Memoria Informativa del documento. De ahí que inste al equipo redactor “a minorar la cantidad de suelo dispuesto como residencial o justificar y determinar las medidas adoptadas en los diferentes sectores de suelo urbano y urbanizable para reducir la capacidad de acogida que dichos suelos poseen de conformidad con los datos aportados por el propio Ayuntamiento” en marzo de 2006.
En aquella fecha, el Ayuntamiento presentó el documento de Aprobación Inicial del PGOU del que desistió en 2010 y los datos poblacionales no han variado con respecto a este documento actual de Avance, del que también se exige “diferenciar las diferentes Piezas Territoriales Turísticas” con las debidas justificaciones de que ninguna de ellas sobrepase las 50 plazas por hectárea, y también los ratios mínimos de dotaciones y equipamientos establecidos en el PIO-GC.
“Bolsas injustificadas” fuera de Arguineguín
En líneas generales, para los técnicos de Planeamiento Insular, “el sistema de ocupación del territorio” de este Avance “difiere del modelo perseguido por el PIO-GC”, debido a la aparición en el Avance de “bolsas significativas de suelo residencial en la franja costera del municipio fuera del núcleo urbano de Arguineguín”.
Esas bolsas residenciales se ubican en el planeamiento municipal “en contacto con el suelo turístico existente y previsto”, y por lo tanto, crea “disfunciones en lo que a estructura territorial, funcionalidad y de dotaciones se refiere”. Por ello el PGO deberá, para pasar el nuevo filtro del Cabildo, “justificar, sin perjuicio de los dictaminado en el presente informe, el cáracter residencial de los suelos señalados como tales” y su compatibilidad con el PIO-GC.
El informe técnico del Cabildo entra también en un sinfín de detalles de los suelos residenciales concretos objeto de discordia con el Plan municipal, y reitera que solo es posible convertir en residencial suelos fuera del núcleo de Arguineguín si suponen “regularización de bordes de núcleos urbanos existentes”, ya que de no ser así, está “expresamente prohibido por el PIO-GC”.
En concreto, Planeamiento Insular se centra en la adscripción a uso residencial de sectores de suelo en Mogán Puerto (SUSNO-R-BM), Morro del Guincho (SUSNO-R-BT) y Tauro (SUSNO-R-LC) contraria a lo estipulado en el Plan Insular de Ordenación al apoyar su crecimiento en suelo urbano distinto del residencial.
El equipo redactor del PGOU deberá justificar que el cambio de uso a residencial de los sectores turísticos establecidos en las Normas Subsidiarias se ha producido, o en cualquier caso se materializa, con anterioridad a la entrada en vigor del PIO-GC, y por tanto no incumpla la premisa de que la recalificación a residencial siempre quede en contacto con suelo urbano consolidado del mismo uso.