Gritos y abucheos por la supresión de líneas de guaguas
Gritos, abucheos y mucho malestar. Eso es lo que expresaron decenas de vecinos este viernes durante la celebración de un pleno ordinario del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, en el que han visto cómo se aprobaba la supresión de varias líneas de transporte urbano que conectan el corazón de la capital tinerfeña con barrios periféricos y humildes como La Salud, Tincer, La Alegría y El Sobradillo.
Lo que se expuso por parte del gobierno municipal de CC y PSC era la aprobación del expediente del convenio de colaboración con el Cabildo de Tenerife para la “reordenación” de los transportes urbanos. Una reordenación que, a la vista de las protestas, no cuenta con el apoyo ciudadano, ya que se suprimen líneas populares o se reducen los coches a ellas asignadas, porque oficialmente “no son rentables”, sobre todo tras la puesta en marcha del tranvía, que une Santa Cruz con La Laguna.
Las quejas del público presente en el Pleno, la mayoría de un barrio afectado, como es Tíncer, obligaron a una recesión de más de una hora, mientras el equipo de Gobierno buscaba una solución para aplacar a los vecinos, sin que le sirviera de mucho al alcalde José Manuel Bermúdez (CC) los avisos de ordenar desalojar la sala.
Durante la recesión José Manuel Corrales, de la coalición Por Tenerife, IU y Los Verdes, comentó que las discrepancias entre CC y PSC “son patentes, ya que no logran ponerse de acuerdo”, y vaticinó, una vez más, que no sería de extrañar una ruptura del pacto del Gobierno.
El expediente fue finalmente aprobado con toda la oposición en contra, incluido el PP. La única modificación fue dejar en suspenso la supresión de la línea 237, la que une el centro de Santa Cruz con Los Andenes, a la espera de que analice el problema una comisión, lo que enfadó aún más al público asistente.
“En contra de los vecinos. A favor del tranvía”
Dado que esa modificación del expediente no pudo ser estudiada por los demás grupos municipales, Corrales ya anunció que impugnaría la votación, dado que el texto “no cuenta con el informe de Intervención” y “es un disparate jurídico”. La postura del concejal de Por Tenerife fue respaldada por Ciudadanos de Santa Cruz y Sí Se Puede. Pedro Fernández Arcila, de Sí Se Puede, añadió que “han llevado este asunto con tanto secretismo que me da pánico. Ha quedado claro que la hoja de ruta la ha marcado el Cabildo”.
Eso es lo que más ha molestado a los vecinos, que continuaron con sus protestas en la calle. “El acuerdo ya estaba tomado. Ya estaba todo decidido. Se trata de favorecer el tranvía, que cuesta el doble que la guagua, en contra de los ciudadanos”, afirmaba a este periódico Miriam Pérez Mendoza, de la asociación Parados Unidos, “Es un atropello, una estafa, porque justo han quitado las guaguas más populares”.
“Nos dicen que los transbordos de guagua a tranvía serán gratis, pero callan que no podremos usar esos transbordos porque se superará el límite de una hora. Ha sido una decisión tomada con premeditación, ya estaba aprobada, pero vamos a movilizar a la ciudadanía”, añadió.