El Parlamento reprueba la paralización de la consulta y agradece el apoyo de Greenpeace y los ecologistas
Los grupos parlamentarios, salvo el PP, han aprobado la “reprobación” a la actuación del Gobierno de España de “impedir la participación popular” en una consulta sobre las prospecciones petrolíferas, a la vez que han agradecido las “actuaciones pacíficas de las organizaciones sociales” medioambientales.
Un agradecimiento que se torna especial en el caso de Greenpeace, cuyos activistas del buque Artic Sunrise fueron atacados por la Armada española, y de WWF, que ha propuesto “la creación de un santuario de ballenas y delfines en la zona afectada por los trabajos de Repsol”.
Para la mayoría del arco parlamentario (28 diputados a favor y 19 en contra), que presentó resoluciones conjuntas, tan grave como impedir la consulta ha sido la “ausencia de respuesta” del Ejecutivo que preside Mariano Rajoy a la “solicitud formal” de la misma que se trasladó por parte de la Comunidad Autónoma.
Salvo para el Grupo Popular, con esta actitud y el inicio de las prospecciones “se desprecia la amplia contestación ciudadana manifestada en el Archipiélago en contra de las citadas prospecciones”.
Acatar la legalidad
Nada que ver con la pretensión de los conservadores, que instaba al Gobierno canario a “reconocer la plena legitimidad de las Cortes Generales y del Gobierno de la Nación en la investigación, exploración y producción de hidrocarburos en España”.
“El Gobierno de Canarias debe acatar y respetar la legalidad vigente en materia de hidrocarburos, afirmó la conservadora Astrid Pérez.
Y, como primer paso para ello, el PP considera necesario “acatar la decisión” adoptada por el Tribunal Constitucional de admitir a trámite los recursos del Gobierno del Estado contra la celebración de una consulta “y a rectificar las insinuaciones sobre la parcialidad de los miembros” del mismo.
“Ni hemos puesto en duda la imparcialidad de los miembros del TC, otra cosa es que discrepemos, y se acató tanto la decisión que el Gobierno de Canarias paralizó la consulta”, ha recordado el socialista Manuel Fajardo.
Tampoco consiguió el principal partido de la oposición que el Ejecutivo que preside Rivero negocie con el Gobierno central “los beneficios económicos que esta nueva fuente de riqueza podría generar en un futuro para las Islas”.
“Es admirable como el PP cierra filas ante una decisión de su jefe de filas, el ministro Soria, que es inexplicable, porque se defienden los intereses de una multinacional que ni siquiera es española”, culminó el nacionalista David De la Hoz.