Román Rodríguez (NC) promete una renta de 600 euros para las familias más pobres
El líder de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, ha vaticinado que tras las elecciones del día 26 solo habrá un gobierno progresista en las islas si su partido determina la mayoría y ha anunciado que, si se da esa circunstancia, promoverá una renta de 600 euros para las familias más desfavorecidas.
“Fernando Clavijo no volverá a ser presidente de Canarias”, ha sentenciado Rodríguez, convencido de que la corriente de apoyo hacia las opciones progresistas que se ha manifestado en las generales se repetirá dentro de 24 días en las autonómicas, de forma que el PSOE será el partido más votado en las islas, como ya lo fue en 2015.
Sin embargo, el presidente de NC considera que ello no asegura por sí solo que Canarias tenga un gobierno de cambio y progresista a partir de ahora, porque cree que existe el riesgo de que el PSOE apueste por fórmulas ya conocidas en esta comunidad autónoma, en una alusión a un posible pacto entre los socialistas y CC.
“En Canarias solo habrá gobierno progresista si NC lo determina”, ha defendido Rodríguez, que considera que su partido es “la garantía” de que se hable en las islas de las cuestiones que realmente preocupan al ciudadano y que han hecho que esta comunidad esté a la cabeza en pobreza, exclusión social y precariedad.
Y en ese contexto, se ha lanzado a hacer su primera gran promesa electoral: una renta mínima de 600 euros mensuales para aquellos ciudadanos en peor situación económica.
Rodríguez ha preferido no concretar dónde podría el listón para tener derecho a ingresar esa paga de 600 euros al mes, aunque sí ha apuntado algunas opciones, como la de complementar con recursos autonómicos hasta esa cantidad los ingresos de los 44.000 canarios que hoy cobran pensiones no contributivas, en su mayoría mujeres.
También ha recordado que NC hizo recientemente una propuesta de una renta básica en el Parlamento de Canarias que no salió adelante. En ella, la formación nacionalista hablaba de unos 60.000 beneficiarios, con un gasto público de 300 millones en tres años.
Román Rodríguez ha defendido, además, que el hecho de que Canarias esté a la cabeza en índices de pobreza y de paro y a la cola en servicios públicos y atención sanitaria “no es cuestión de mala suerte ni de ninguna maldición”. “Es mala gestión”, ha añadido.
Si gobierna, NC se propone reducir de forma radical las listas de espera y reactivar las políticas de vivienda pública, para construir 10.000 en el plazo de una legislatura.
Rodríguez ha enfatizado la magnitud de este compromiso al recordar que en los últimos diez años no se ha construido “ni una sola” vivienda social en Canarias.
También se ha comprometido a cambiar por completo la gestión en materia de dependencia, porque entiende que Canarias puede administrar esa competencia de la misma manera que lo hacen algunas de las comunidades con mejores resultados en esta materia, entre las que ha citado a Castilla y León y Aragón.
“¿Cómo no vamos a ser capaces de hacerlo? Pero hoy somos los peores del Estado”, ha recalcado.
En cuanto a sus expectativas electorales, NC cree que conservará la presidencia del Cabildo de Gran Canaria en la persona de Antonio Morles, que tendrá no menos de diez Alcaldías (incluida la de la ciudad de Telde) y que elevará su representación en el Parlamento.
Sobre este último caso, ha vaticinado que Carmen Hernández, la cabeza de lista por Gran Canaria, mejorará los resultados que él obtuvo en 2015 (cuatro diputados) y que NC sumará escaños procedentes tanto de Lanzarote y Fuerteventura como de la nueva lista regional.
NC pagó en las generales el voto útil contra la derecha
Rodríguez ha defendido que su partido pagó en las generales la movilización del “voto útil para frenar a la derecha”, de la que considera que se beneficiaron en las islas el PSOE y Podemos, no ningún tipo de trasvase de apoyos hacia CC.
En las generales, Nueva Canarias no solo perdió sus dos escaños en el Congreso y el Senado (uno en cada Cámara), sino que vio cómo Coalición Canaria se quedaba a 1.400 votos de igualar su resultado en su tradicional feudo de la provincia de Las Palmas.
Sin embargo, Román Rodríguez no cree que Coalición Canaria haya captado parte de los votos que hace tres años concedieron a Pedro Quevedo y a María José López escaño en el Congreso y el Senado.
A su juicio, Coalición Canaria le ha quitado votos al PP y a Ciudadanos y ha atraído apoyos que en otros lugares de España han acabado en Vox, porque su cara más visible en estos comicios, Ana Oramas, “ha sabido liderar” durante la campaña el voto de derechas.
Rodríguez pone como ejemplo de que eso es así el resultado de Compromís en la Comunidad Valenciana, en una jornada electoral en la que allí coincidían elecciones generales y autonómicas.
El pasado día 28, ha enfatizado el líder de NC, Compromís vio como los mismos electores le daban un 17 % de apoyo para las Cortes Valencianas y menos de la mitad, el 6,4 %, para el Congreso.
Y la explicación reside, desde su punto de vista, en el mismo fenómeno al que NC achaca sus malos resultados de estas generales: la polarización de la campaña en el electorado progresista para “frenar a la derecha y la ultraderecha”, que primado el voto útil al PSOE.