Los vecinos vuelven a impedir las obras de la cárcel
Vecinos de San Bartolomé de Tirajana volvieron a impedir hoy la reanudación de los trabajos previos a la construcción de la segunda cárcel de Gran Canaria, que insisten son ilegales, mediante denuncias a la Policía Local y movilizaciones que llevaron a desistir a los obreros.
Éstos llegaron a contar con protección de la Policía Nacional, que conminó a los manifestantes a abandonar la zona aunque sin éxito, según anuncia en un comunicado el llamado Consejo Abierto de Vecinos de Castillo de Romeral, promotor de la oposición a la cárcel, que destaca que, pese a esa circunstancia, los trabajadores decidieron abandonar su propósito.
En principio, éste era realizar trabajos de vallado de la finca donde se hacen las obras, relata el escrito, que añade que, ante la actitud de los obreros, se pusieron en marcha “los vecinos que se encontraban de guardia” en la zona, que lograron que agentes de la Policía Local levantaran un acta “constatándose que carecían de permisos” para su actividad.
Tras narrar que los trabajadores insistieron en su actitud, logrando luego el apoyo de la Policía Nacional, el texto concluye que el agente al mando, tras dialogar con los manifestantes, “habló con los encargados de la obra, que, observando la situación y alteración de los vecinos, optaron por desistir en los trabajos”.
Pese a ello, el Consejo de Vecinos anuncia que ha decidido denunciar por los hechos de hoy a la Sociedad Estatal de Instituciones Penitenciarias, a la empresa constructora Hermanos Tito y a la Policía Nacional, al final de un escrito en el que, al tiempo, pide al Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana que “se precinten ya las obras ilegales”. EFE