Zerolo se ríe y el PP calla
El pleno celebrado este sábado en el Ayuntamiento de Santa Cruz apenas se salió del guión programado, desde el punto de vista de las intervenciones de los grupos y del alcalde, Miguel Zerolo. Cosa distinta es lo que sucedía entre el público y en especial con la claque que últimamente visita el salón para aplaudir a Zerolo, diga lo que diga y haga lo que haga.
Sin embargo, lo más elocuente fue el silencio del PP respecto al caso de Las Teresitas, lo que resulta, cuando menos, sospechoso, después de que su candidato a la alcaldía en las pasadas elecciones, Ángel Llanos, anunciara su oposición al convenio y su decisión de paralizar las obras si hubiera ganado. Por lo que se ha visto hasta ahora en sólo dos días, Llanos comienza su carrera política en el Ayuntamiento uniéndose sin pudor con aquellos a quienes criticó con dureza en campaña, incumpliendo los mandamientos por los que dice regirse y con los que se presentó a las elecciones, en especial uno: “No dirás falsos testimonios ni mentirás”.
En un asunto de la trascendencia de la urbanización de Las Teresitas, con diez personas imputadas por , entre ellas, como es sabido, el alcalde y el secretario del Ayuntamiento, José Eugenio de Zárate, el PP no tuvo nada que decir. Ya lo adelantó este viernes Ángel Llanos, acusador de Zerolo hasta la semana pasada, al unirse a la iniciativa del alcalde de recurrir la sentencia del Tribunal Supremo.
Sobre el pleno en sí, lo más destacable fue la negativa de Zerolo a discutir una propuesta de resolución que pretendía presentar el portavoz de Ciudadanos de Santa Cruz, Guillermo Guigou, al final del pleno. Estaba esperando la inauguración del tranvía y no había que perdérsela, dado que repartían gratis vino, queso y arbolitos.
De resto, cada uno estuvo en su papel: el portavoz de CC, Bruno Piqué, leyendo un informe jurídico entre vaso de agua y vaso de agua, Zerolo defendiendo la legalidad de todo el proceso y ocultando su responsabilidad tras los informes de los funcionarios, el portavoz socialista, Ramiro Cuende, empezando con cierta dureza y después bajando el nivel ante las contradicciones de su partido en el proceso, puestas en evidencia con eficacia por Zerolo, y la contundencia de las palabras de Guillermo Guigou y, sobre todo, de Ángel Isidro Guimerá.
Guimerá no sólo desmontó el informe jurídico presentado este sábado en el pleno por el equipo de gobierno para defender un recurso más que improbable ante el Tribunal Constitucional, sino que destacó algo verdaderamente clamoroso: el informe está firmado no sólo por el jefe de los servicios jurídicos sino por el secretario, José Eugenio de Zárate, implicado en la operación de compraventa que el Supremo ha declarado nula. Para Zerolo, recordar este hecho fue algo “de mal gusto”, lo que contrasta, obviamente, con la pasividad del alcalde ante los insultos que la claque de ATI dedicaba a todos los ciudadanos que se atrevían a aplaudir a Guigou o Guimerá.
En fin, que el fondo de la cuestión, la sentencia del Tribunal Supremo, no es una cuestión de gustos, para desgracia de Zerolo y sus hooligans, sino de cumplir o no y el fallo del alto tribunal. Por lo visto este sábado, el alcalde, que estuvo muy risueño durante gran parte del pleno, no va a cumplir la sentencia. Por ahora.
