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Opinión - Junts, el bolsillo y la patria. Por Neus Tomàs

Abogan por utilizar el barco para agilizar las repatriaciones

Las repatriaciones de inmigrantes irregulares africanos llegados a la Unión Europea, que muchas veces rechazan los gobiernos de sus países por el impacto que causan los vuelos con medidas de seguridad que se organizan para llevarlas a cabo, se podrían agilizar de efectuarse en barco.

Esta tesis fue planteada este miércpñes, en la Conferencia Policial Euro-Africana sobre Inmigración Irregular que reúne desde ayer en Las Palmas de Gran Canaria a representantes de 22 países europeos y 14 africanos, por la representante de la seguridad de Francia en la reunión Chantal Conard, coordinadora de la sesión de debate sobre Repatriación y retorno del encuentro.

Y es que los inmigrantes detenidos “son más reacios a ser repatriados mediante vuelos, son gente que manifiesta su descontento ante esos traslados”, lo que obliga a efectuarlos con medidas de seguridad que crean el rechazo de la población y, a partir de ahí, de los gobiernos de los países de origen de los irregulares, argumentó la representante francesa.

Como ejemplo de sus palabras, explicó que “actualmente las autoridades marroquíes no permiten hacer vuelos de seguridad” para repatriar a los inmigrantes de su país, y que ello ha llevado al Gobierno de Bélgica a plantearse solicitar al de España trasladarlos a este país por avión para luego, desde aquí, efectuar la repatriación efectiva llevándolos a Marruecos en barco.

Medio de transporte éste -recalcó- “que es un método de repatriación más aceptado que el avión”.

Chantal Conard precisó que Bélgica se ha planteado esa posibilidad de usar España como puente en esas repatriaciones, “sobre todo, en lo referente a las personas de nacionalidad marroquí que son recalcitrantes, que se les ha interceptado cinco, seis, siete veces, incluso se les ha repatriado, y que solamente deben ser alejadas por seguridad”.

Desde esa experiencia belga, similar a las vividas en otros países europeos, la representante francesa dijo comprender las dificultades que también ha encontrado el Gobierno español, por ejemplo, cuando los primeros vuelos de repatriación de senegaleses pactados este año fueron rechazados en el último momento por las autoridades de su países de origen.

De hecho, al ser preguntada sobre si España cumple o no su tarea de repatriación de inmigrantes irregulares en igual medida que otros países de la Unión Europea, algo que han cuestionado políticos de la oposición y autoridades de otros estados miembros, recalcó que su Gobierno “participa en vuelos, como otros países, siempre y cuando esos vuelos sean aceptados por los países de origen”.

Advirtió en cualquier caso de que, como técnica de seguridad de su país, no es su misión emitir opiniones que puedan considerarse políticas.

Sí que precisó, no obstante, que mejorar los mecanismos de devolución de los inmigrantes irregulares de origen africano a sus países es un objetivo no sólo de España, sino de la generalidad de los países de su entorno.

“Hay una voluntad europea de ampliar y acelerar el trabajo en materia de repatriación, de intercambiar experiencias y hacer vuelos europeos”, declaró a ese respecto Chantal Conard.

Como conclusión, opinó que buscar fórmulas que hagan viables y agilicen esas repatriaciones “es un problema más bien práctico, en el que la cooperación internacional podría ayudar”.

La Conferencia Policial Euro-Africana sobre Inmigración Irregular que se celebra en Las Palmas de Gran Canaria, organizada por la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil española, se prolongará hasta el viernes 10 de noviembre.

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