Bruselas propone prohibir internar a los menores solicitantes de asilo
La Comisión Europea ha propuesto prohibir la detención de los menores no acompañados (Menas) demandantes de asilo. En este sentido, la proposición de Bruselas sobre las condiciones de acogida de los solicitantes de asilo especifica que en el caso de que un menor no acompañado formule una petición de asilo no debe permanecer en un centro de “detención” sino en uno “especializado”, es decir, “de acogida”, explicaron fuentes del Ejecutivo comunitario y añadieron que los menores sólo podrían internarse en su propio interés, por ejemplo, para estar junto a sus padres si estos se encuentran en un centro de internamiento.
Estas fuentes indicaron que normalmente es la propia persona la que debe presentar la solicitud de asilo pero que, en el caso de los menores no acompañados, el propio estado miembro y sus instituciones de acogida pueden informarle de sus derechos y determinar en base a su propio testimonio si es un potencial refugiado.
Esta propuesta de directiva sobre las condiciones de acogida para los demandantes de asilo -que el Ejecutivo comunitario adoptó el pasado 6 de diciembre- no sólo limita el internamiento de los Menas, sino que de modo global fija que sólo se puede recurrir a él en determinados casos, como para comprobar la nacionalidad o por razones de seguridad.
Asimismo, Bruselas plantea que se creen mecanismos a nivel nacional para identificar en la primera fase del procedimiento de asilo a las personas con necesidades particulares y garantizar que se les dé un trato adecuado; así como que no se obstaculice el acceso al mercado laboral a los refugiados.
El vicepresidente del Ejecutivo comunitario y comisario europeo de Libertad, Seguridad y Justicia, Jacques Barrot, destacó que “al modificar la directiva sobre condiciones de acogida mejoramos las condiciones de vida de los solicitantes de asilo, restringimos su internamiento a casos limitados y justificados, lo prohibimos en el caso de los menores, y atendemos adecuadamente a las necesidades de las personas vulnerables, como las víctimas de torturas”.
Aparte de su propuesta de directiva para modificar las condiciones de acogida de los solicitantes de asilo, la Comisión Europea también aprobó el 6 de diciembre otras dos proposiciones enmarcadas en el Sistema Europeo Común de Asilo: el Reglamento de Dublín, que determina cuál es el Estado miembro responsable de una solicitud de asilo y el Reglamento Eurodac, una base de datos que contiene las huellas dactilares de los solicitantes de asilo, y que apoya el funcionamiento del anterior.
Según Bruselas, el objetivo de los cambios propuestos “es garantizar que todos los solicitantes de asilo sean tratados de manera justa y equitativa cuando presenten solicitudes de asilo en la UE”, así como “mejorar la eficiencia del sistema de asilo” europeo.